¡DIOS ESTA DICIENDO SALTA!
Saltar: quiere decir que pasarás a través de una transición repentina.
Saltar: también significa que te volverás ágil moviéndote del piso repentinamente usando los músculos de tus piernas.
Saltar: también significa brincar, pasar por encima o alzarse con impulso rápido, separándose de donde se está.
En este año de transición debemos de encontrar nuestro sitio de partida al igual que nuestro sitio de entrada. Hay ciertas cosas que necesitamos dejar atrás. A medida que abandonamos una fase o época veremos nuestro lugar para entrar.
Que Dios acelere el tiempo para ustedes. Desarrollen nuevas fuerzas para correr la carrera que tienen por delante. Búsquenle como nunca antes, y todas las cosas les serán añadidas.
Salten hacia delante este mes y se encontrarán moviéndose en la voluntad perfecta de Dios. El Señor esta liberando gracia y favor sobrenatural para que podamos lidiar con nuestros enemigos y frustrar las estrategias del infierno que nos detendrían de avanzar.
El Salmo 18:28-29 dice: “Señor, mi Dios, tú mantienes mi lámpara encendida; ¡tú eres la luz de mis tinieblas! Con tu ayuda, mi Dios, puedo vencer ejércitos y derribar murallas” No solamente podemos saltar muros, sino que también continúo viéndonos encontrando nuestra nueva puerta y yendo hacia delante en terreno enemigo que nunca antes habíamos asegurado.
Bendiciones,
Chuck D. Pierce
NOTA DE MAGIE
Habacuc 3: 17-19 Aunque todavía no florece la higuera, ni hay uvas en los viñedos, ni hay tampoco aceitunas en los olivos, ni los campos han rendido sus cosechas; aunque no hay ovejas en los rediles ni vacas en los corrales, yo me alegro por ti, Señor; ¡me regocijo en ti, Dios de mi salvación! Tú, Señor eres mi Dios y fortaleza. Tú, Señor, me das pies ligeros, como de cierva, y me haces andar en mis alturas.
Estamos en un tiempo de transición donde habrá una visión fresca. Dios está llevando las cosas hacia otro nivel mientras perseveramos avanzando hacia un nuevo lugar en Él. Las transiciones son saludables y buenas para nosotros. Mientras nos estiramos hacia un nuevo lugar, experimentaremos un gozo fresco en ese nuevo nivel.
Es importante que abramos nuestros corazones a la visión fresca del Señor. Es demasiado fácil ir por la vida sin una dirección definida. Si permitimos que esto suceda, nos sentiremos como si estuviéramos apurados por llegar rápido a ninguna parte. Una vida sin visión está destinada a carecer de propósito. Debemos tener una visión para tener propósito. Nuestra visión principal es el Señor.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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