Esta semana compartí esta pequeña palabra a través de Facebook: “Dios está limpiando el desorden para hacer tu camino y tus pasos más claros. El tiempo de sequedad e ignorancia está terminando”
Jeremías 31:28 Y así como estuve atento para arrancar, derribar, echar abajo, destruir y causar daños, así también estaré vigilante para construir y plantar. Yo, el Señor, lo afirmo.
Escuchaba a la Profeta Barbara Yoder compartir en la Asamblea de Intercesores esta palabra profética que confirmó una vez más el profundo trabajo de limpieza y reconstrucción que Dios está haciendo en cada uno de nosotros y en la Iglesia de Cristo.
“Dios está reconstruyendo Su casa. No son unos pequeños arreglos aquí o allá, sino realmente El esta reconstruyendo Su casa, esto significa nuestra casa individual, Su Iglesia, nuestras ciudades, las naciones. Dios está haciendo algo nuevo, no es un cambio de época sino un cambio de era y Dios está transformando nuestra manera de ver las cosas”.
“Estamos en un tiempo en donde nos vamos a ver mejor, porque Dios está haciendo algo nuevo. Dios va a permitir cualquier cosa con tal de llevarnos a un nuevo lugar. Dios está removiendo las cosas muertas de nosotros. Las cosas que no nos sirven para nada”
“Dios dice: “¡Estoy removiendo las cosas muertas de tu vida y te estoy dando algo nuevo para el futuro!”. Yo creo que muchos de nosotros hemos pasado por circunstancias en donde Dios esta removiendo las cosas viejas para poner nuevas. Esta reconstruyendo nuestra fe para enfrentar el futuro”
Hace unos días fuimos a orar por unos amados amigos que se cambiaron a una nueva casa. Necesitábamos limpiar la casa espiritualmente, así que no les importó el desorden ni la incertidumbre que estaban viviendo pues el cambio tuvo que ser repentino. Estando allí, Dios me mostró que lo que estaba ocurriendo en lo natural, estaba ocurriendo en lo espiritual en sus vidas y las de muchos de nosotros.
Cuando estamos cambiando algo primero se ve caótico. Cuando remodelamos nuestra casa primero se ve terrible y luego se ve mejor, hay polvo en todas partes muebles por todos lados, probablemente nos sentiremos frustrados por un tiempo y no porque sea malo sino porque estamos pasando por una transición.
Unos días después el Señor me llevó a Hageo 1:7-8 »Así ha dicho el Señor de los ejércitos: “Piensen en lo que hacen. Vayan al monte, y traigan madera, y reconstruyan mi casa. Yo pondré en ella mi beneplácito, y seré glorificado.” Yo, el Señor, lo he dicho.
Ahora puedo armar el rompecabezas completo. Muchos de nosotros hemos pasado por un tiempo en donde hemos sentido que todo nos ha sido quitado. Ha sido incontrolable, hemos sentido mucha presión, Dios ha demandando un cambio en el ámbito espiritual de nuestras vidas. Está mirando en lo profundo de nuestros corazones, examinando los motivos y las acciones y exigiendo de nosotros un arrepentimiento genuino para poder edificar y plantar.
Hageo 2:9 »Al final, la gloria de esta casa será mayor que al principio, y haré que en este lugar haya paz. Lo digo yo, el Señor de los ejércitos.» —Palabra del Señor de los ejércitos.
Tomemos como ejemplo a Esdras y Nehemías, dos valerosos hombres que se humillaron delante de Dios y se pusieron a la brecha para reconstruir lo que estaba derribado. Regocijémonos en nuestro Dios que es el mismo de ayer, de hoy y de siempre. Dios muestra su misericordia a cada generación. Restaura a su pueblo compasivamente. Sin importar cuan difícil sea nuestro “cautiverio” presente, nunca estamos lejos de su amor y su misericordia. Dios nos restaurará conforme nos volvemos a El.
No es suficiente con decir que creemos. Debemos hacer los cambios que Dios requiere en nuestras vidas y hogares en este tiempo de transición.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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