Además de todo esto, tomen el escudo de la fe, con el cual pueden apagar todas las flechas encendidas del maligno. Efesios 6:16
Muchos se han estado sintiendo desanimados y sin esperanzas. Las pruebas de los últimos meses los han dejado sin fuerzas. A pesar que han orado, ayunado, reprendido al enemigo, estas pruebas les han parecido una eternidad y ahora se preguntan si habrá algún método cuando Dios les dice “Sigan confiando en Mi”.
Hay una buena razón de porque las cosas han tenido que esperar y es porque Dios ha estado trabajando profundo en nuestros corazones. Este es un acto de misericordia de parte de Dios. La principal obra de Dios es asegurarse que estemos firmes, arraigados en Su amor, purificados y con una fe que vence todo obstáculo. Aquellos que se moverán hacia una realidad superior de autoridad necesitan comprender que un manto y unción sustentables no son posibles sin pasar pruebas. La unción sin pruebas no es sustentable. Dios no quiere darnos sólo una unción temporal y una apertura momentánea. Quiere que seamos capaces de sostenerla.
Por otro lado, el enemigo nos estudia de cerca con el fin de poder identificar nuestras debilidades y utilizarlas contra nosotros, y él puede ver cuándo tienes una mirada de fe y cuándo la tienes de duda. El enemigo ha lanzado un ataque para cubrir nuestro entorno espiritual con pesadez. La primera señal de esta intromisión es una sensación de opresión o incluso depresión sin razón alguna. Permanezcan en guardia en contra de estos sentimientos negativos y prepárense para levantarse y luchar contra estos ataques.
Satanás atraviesa todos los límites, utiliza todas sus tácticas para derrotarte. Vendrá con tormentas de gran adversidad para desalentarte y hacerte “volver a lo viejo”. Pero cuando recuerdas que Jesús ganó la batalla contra Satanás en la Cruz, puedes tomar el escudo de la fe y usarlo en contra de las mentiras del enemigo ¡para ganar la batalla!. Lo mismo es verdad en nuestra guerra espiritual. Nuestras batallas más duras invariablemente concernirán a asuntos de la fe — aquellas épocas cuando estamos tentados a pensar que la Palabra de Dios y Sus caminos no funcionan con nosotros o que Él nos ha fallado. Si Satanás puede hacer que dejemos caer nuestro escudo de la fe, él sabe que no podemos permanecer de pie por mucho tiempo.
Cuando te vuelves radical en tu fe, todo cambia. La oración, la alabanza y la adoración serán una parte de tu caminar diario, y habrá una determinación que nada ni nadie podrá sacudir. Créele a Dios para lo imposible, se paciente mientras Dios termina en ti la obra que comenzó, permite que ponga cimientos firmes porque lo que El está planeando construir en ti será muy grande. ¡Alégrate! ¡Las áreas de tus mayores pruebas serán las de tu mayor unción! Las mismas asignaciones que el enemigo tiene en contra de tu vida están a punto de volverse en su contra. Dios está por soltar una unción y una gloria más profundas donde tuvo los niveles más profundos de guerra y contienda.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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