El les dijo: «Echen la red a la derecha de la barca, y hallarán.» Ellos echaron la red, y eran tantos los pescados que ya no la podían sacar. Juan 21:6
Por: Keith Luker
Recibí esta palabra profética repetidamente en esta época para personas, líderes, empresarios e iglesias. Creo que es un mensaje oportuno para el Cuerpo de Cristo en todo el mundo.
Muchos de nosotros hemos estado perseverando con fe y creyendo a Dios para grandes cosas en nuestras vidas. Al mismo tiempo, muchos han experimentado demoras, desengaños y desánimo ya que las circunstancias han dificultado nuestros sueños y nuestro duro esfuerzo. Tal vez parezca que no está ocurriendo nada, pero yo creo que la palabra del Señor para aquellos en esta situación es: “¡Ánimo!. Toda semilla sembrada en fe DEBE producir una cosecha de bien y de incremento en tu vida”.
Jeremías 29:11-12 es emotivo: “Porque yo sé muy bien los planes que tengo para ustedes-afirma el SEÑOR –, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza. Entonces ustedes me invocarán, y vendrán a suplicarme, y Yo los escucharé”.
Esto no es una mera ilusión o simplemente tener una actitud mental positiva. Esta es la garantía del Cielo, certificada por las Sagradas Escrituras, y del Padre mismo quien jamás ha fallado en cumplir. El espíritu de Dios está gritando este mensaje a todos aquellos que nos hemos esforzado en fe para llegar a un cambio positivo y hemos salido con las manos vacías: “¡Ajústalo e inténtalo de nuevo!”
ECHA LA RED EN EL OTRO LADO
Hay un elemento sobrenatural que desciende sobre nuestros esfuerzos y completa mente tornará esta actividad aparentemente infructífera a una abundancia inmediata y rebosante. Jesús Entra hoy en tu barca con las instrucciones para el día de hoy: “Echa tu red al otro lado”. Hay dos relatos en los evangelios que describen esto de manera dramática.
PRINCIPIO: Lucas 5:4-11 Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: Boga mar adentro, y echad vuestras redes para pesca. Respondiendo Simón, le dijo: Maestro, toda la noche hemos estado trabajando, y nada hemos pescado; mas en tu palabra echaré la red. Y habiéndolo hecho, encerraron gran cantidad de peces, y su red se rompía. Entonces hicieron señas a los compañeros que estaban en la otra barca, para que viniesen a ayudarles; y vinieron, y llenaron ambas barcas de tal manera que se hundían. Viendo esto Simón Pedro, cayó de rodillas ante Jesús, diciendo: Apártate de mí, Señor, porque soy hombre pecador. Porque por la pesca que habían hecho, el temor se había apoderado de él, y de todos los que estaban con él, y Todos los que estaban con él, y asimismo de Jacobo y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón. Pero Jesús dijo a Simón: No temas; desde ahora serás pescador de hombres. Y cuando trajeron a tierra las barcas, dejándolo todo, le siguieron.
FIN: Juan 21:3-7 Simón Pedro les dijo: Voy a pescar. Ellos le dijeron: Vamos nosotros también contigo. Fueron, y entraron en una barca; y aquella noche no pescaron nada. Cuando ya iba amaneciendo, se presentó Jesús en la playa; más los discípulos no sabían que era Jesús. Y les dijo: hijitos ¿tenéis algo de comer? Le respondieron: No. Él les dijo: echad la red a la derecha de la barca, y hallareis. Entonces la echaron, y ya no la podían sacar, por la gran cantidad de peces. Entonces aquel discípulo a quien Jesús amaba dijo a Pedro: “¡Es el Señor!!” Simón Pedro, cuando oyó que era el Señor se ciñó la ropa (porque se había despojado de ella), y se echó al mar.”
Hay varias cosas que me llaman la atención cuando leo esas asombrosas historias de milagros.
- Trabaja, ¡Tu esfuerzo no será en vano!
- Escucha a Jesucristo.
- Debes estar dispuesto a cambiar.
- Ajústalo inténtalo de nuevo (Obedece).
- ¡Disfruta del milagro!
- Ajústate a la bendición.
- Deja que la presencia de Jesús purifique tu corazón.
- Déjalo todo y síguele a Él.
- ¡Bienvenido a tu nueva vida!
La visión todavía es la correcta. Seguir a Jesús, trabajar duro y esperar milagros DARÁ RESULTADO. ¡Ajústalo e inténtalo de nuevo! ¡Vamos! Es tiempo de cosecha para tus sueños.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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