!HUELE A VICTORIA!

Como bien saben, ustedes fueron rescatados de la vida absurda que heredaron de sus antepasados. El precio de su rescate no se pagó con cosas perecederas, como el oro o la plata, sino con la preciosa sangre de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin defecto. 1 Pedro 1:18-19

Fuimos redimidos del pecado y la tumba, pero hay mucho más. Tenemos una vida abundante de la que Jesús habló en Juan 10. Abundantemente significa que excede y supera toda la medida que necesitamos. Continuar Leyendo »

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