TOMA MIS LAGRIMAS EN TU REDOMA

Tú has visto mi sufrimiento, has recogido mis lágrimas. ¿Acaso no tienes todo eso registrado en tu libro? Mis enemigos huirán cuando yo pida tu ayuda. Yo sé que Dios está de mi parte. Salmos 56:8-9

Hay muchas cosas en la vida que pueden llenarnos de amargura, la muerte de un ser querido, un divorcio, un hijo pródigo, una enfermedad, una pérdida económica etc. Nos amargamos tanto que no podemos ver los rayos de luz y esperanza. Continuar Leyendo »

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