Cuando la mujer está para dar a luz, tiene aflicción, porque ha llegado su hora; pero cuando da a luz al niño, ya no se acuerda de la angustia, por la alegría de que un niño haya nacido en el mundo. Juan 16:21
Muchos en el Cuerpo de Cristo estamos ahora en un lugar de nacimiento de promesas. Nos encontramos en una transición, para dar a luz las promesas por las que hemos orado y gemido. Lo que estamos experimentando en este momento es similar a un parto natural. Quienes saben cómo funciona, saben que la transición sucede antes de dar a luz. Esta es la parte más intensa del parto. Las contracciones son generalmente muy fuertes y seguidas una de otra. Este es el momento en el cual la madre se siente tan agotada, que piensa que no podrá continuar, pero viene el momento de pujar porque el bebé tiene que nacer. Aunque nos sintamos cansados, no podemos rendirnos ni llenarnos de temor. Cobremos ánimo y valor sabiendo que si estamos en este lugar es porque le hemos creído a Dios, un día concebimos promesas en nuestro vientre espiritual, y este es el momento del nacimiento.
Lorilei Cooley compartió hoy este mismo sentir. Es importante comprenderlo, porque muchos hemos sentido la tentación de ceder ante los pensamientos que el enemigo pone en nuestra mente como: “Nada está funcionando, Dios no está conmigo, ¿realmente fue Dios quien dijo esto?” Olvidemos por un momento al enemigo. Nuestro propio corazón es engañoso y puede ser nuestro mayor enemigo con pensamientos fuertes como: “¡No puedo hacer esto, y no quiero hacerlo!” (Jeremías 17:9) ella escribió:
“Puede haber una sensación de cansancio, inquietud, una sensación de “JET LAG”, pero espere. Estamos ahora acelerando y en una transición hacia la manifestación. Lo que está siendo liberado por el Señor ahora mismo, no vendrá de la manera que usted piensa, vendrá mucho mejor de lo que anticipó o esperó. El Señor está llevándonos más alto para que veamos que Él está haciendo mucho más de lo que pensamos o conocemos”.
“Nos está liberando completamente de la opresión y la desolación. El fruto de nuestro trabajo está a punto de irrumpir. Aunque ha sido largo y agotador, el Señor nos está liberando porque no podemos ser retenidos por más tiempo. Él ha organizado muchas cosas muy rápidamente y ha hecho lugar para nosotros. El Señor está cumpliendo Sus promesas con nosotros. Estamos a punto de entrar en la tierra que El nos prometió y en nuestra herencia donde fluirá la leche y la miel”
NOTA: El “JET LAG”, también denominado «trastorno de desfase horario», es un problema temporal del sueño que puede afectar a cualquier persona que viaja velozmente a través de múltiples horarios. Los síntomas del “JET LAG” pueden variar. Es posible que experimentes solo un síntoma o muchos. Algunos de los síntomas del jet lag son los siguientes: Alteración del sueño como insomnio, despertarse temprano o somnolencia excesiva, fatiga durante el día, Dificultad para concentrarse o desenvolverse al nivel habitual. Problemas estomacales, estreñimiento o diarrea. Una sensación general de malestar, cambios de humor
El enemigo ha estado tocando a la puerta del Pueblo de Dios, buscando por donde entrar. La Palabra de Dios nos anima a caminar en el Espíritu y no ceder a los deseos de nuestra carne. Mantengámonos orando, adorando, leyendo Su Palabra, conectados con Dios. Eso fortalecerá nuestro espíritu. El enemigo busca desanimarnos antes de entrar por el umbral de los nuevos comienzos. Resístanlo manteniéndose firmes en la fe.
1 Pedro 5:6-11 Así que humíllense ante el gran poder de Dios y, a su debido tiempo, él los levantará con honor. Pongan todas sus preocupaciones y ansiedades en las manos de Dios, porque él cuida de ustedes. ¡Estén alerta! Cuídense de su gran enemigo, el diablo, porque anda al acecho como un león rugiente, buscando a quién devorar. Manténganse firmes contra él y sean fuertes en su fe. Recuerden que su familia de creyentes en todo el mundo también está pasando por el mismo sufrimiento. En su bondad, Dios los llamó a ustedes a que participen de su gloria eterna por medio de Cristo Jesús. Entonces, después de que hayan sufrido un poco de tiempo, él los restaurará, los sostendrá, los fortalecerá y los afirmará sobre un fundamento sólido. ¡A él sea todo el poder para siempre! Amén.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
Recibe la palabra profética en tu correo electrónico.
