Sigan por el camino que el Señor su Dios les ha trazado, para que vivan, prosperen y disfruten de larga vida en la tierra que van a poseer. Deuteronomio 5:33
El deseo de Dios es que recuperemos todo, que poseamos esta tierra, recuperemos lo que nos ha sido robado y que realmente obtengamos todos los beneficios que Jesús compró para nosotros en la Cruz. Una de las maneras más poderosas en que podemos “CAMBIAR EL RUMBO” de lo que está sucediendo en nuestras vidas y a nuestro alrededor es a través de nuestra OBEDIENCIA RADICAL A DIOS. La obra ya fue consumada en la Cruz del Calvario, ahora Dios espera que Su palabra baje de nuestra mente a nuestro corazón y comience la acción, ya tenemos el potencial para vivir la plenitud de vida que Él diseñó, pero nuestra responsabilidad es rendirnos a Su camino para desarrollar ese potencial.
Este es un tiempo para volvernos a Dios y ponernos el “CELO DEL SEÑOR” como un manto (Isaías 9: 7), Dios se deleita en la obediencia (1 Samuel 15:20-22) esta es una buena noticia, porque sus mandamientos no son tan difíciles. Son sólo tan difíciles de obedecer como su gloria es difícil de apreciar y sus promesas difíciles de creer. Deuteronomio 30:11 dice: “Este mandamiento que yo te ordeno hoy no es muy difícil para ti, ni fuera de tu alcance”. Y 1 Juan 5:3 dice: “Porque este es el amor de Dios: que guardemos sus mandamientos, y sus mandamientos no son gravosos”. La obediencia a Dios no es una serie de procesos para satisfacer nuestra necesidad, la obediencia son los esfuerzos incontenibles de todos aquellos que han probado esa AGUA QUE DA VIDA y han visto que el Señor es bueno.
Romanos 2:4 ¿No te das cuenta de lo bondadoso, tolerante y paciente que es Dios contigo? ¿Acaso eso no significa nada para ti? ¿No ves que la bondad de Dios es para guiarte a que te arrepientas y abandones tu pecado?
DIOS TE DICE: Sean obedientes a Mi Palabra, ya que será su lugar de seguridad y protección en medio de una generación maligna y perversa. Ustedes no pueden hacer nada con esta generación, pero si pueden hacer mucho por las personas en Espíritu y Verdad. Manténganse íntegros, aunque estén rodeados de oscuridad y problemas. Ustedes son hijos de luz y no de oscuridad, así que caminen en la luz, dice el Señor. Caminen en el Espíritu.
LECTURA PARA HOY: Deuteronomio 11:26-28; Deuteronomio 28; Hebreos 5:7-9. Hoy es un día para pedir perdón por el pecado de DESOBEDIENCIA. Si queremos la bendición y la presencia de Dios en nuestra vida, la clave es la OBEDIENCIA. Cada uno de nosotros debe encontrar un lugar especial y quieto donde podamos hacer callar las preocupaciones de este mundo y estar a solas con Dios confesando nuestras faltas. Obedecer a Dios en cada acto de nuestra vida es demostrarle cuanto lo amamos. Jesús dijo: Si me aman, guarden Mis mandamientos (Juan 14:15).
Romanos 5:18-19 Así es, un solo pecado de Adán trae condenación para todos, pero un solo acto de justicia de Cristo trae una relación correcta con Dios y vida nueva para todos. Por uno solo que desobedeció a Dios, muchos pasaron a ser pecadores; pero por uno solo que obedeció a Dios, muchos serán declarados justos.
OREMOS:
Señor, perdona mi desobediencia, Y en tu Nombre Señor, echo fuera de mi vida todo espíritu de desobediencia, de rebeldía y de endurecimiento espiritual que quiera gobernar mi vida. Hoy renuncio y me arrepiento en mi nombre y en el de todos en mi línea familiar que perecieron por falta de conocimiento, porque no te buscaron a Ti el único Dios verdadero, ni tu conocimiento y sabiduría, sino que siguieron sus propios deseos. Te pido perdón, por no seguir los mandamientos establecidos en Tu Palabra, por no buscar tu guía. Por favor, restaura en mí todas las bendiciones y beneficios de la obediencia. Ayúdame a poner Tu Palabra en acción en mi vida, para que mi obediencia sea de bendición a todos los que verán Tu obra en mí. Amen.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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