DE LA AFLICCION AL GOZO

Pero Ana respondió y dijo: No, señor mío, soy una mujer angustiada en espíritu; no he bebido vino ni licor, sino que he derramado mi alma delante del Señor. No tengas a tu sierva por mujer indigna; porque hasta ahora he orado a causa de mi gran congoja y aflicción. Respondió Elí y dijo: Ve en paz; y que el Dios de Israel te conceda la petición que le has hecho Y ella dijo: Halle tu sierva gracia ante tus ojos. Continuar Leyendo »

Publicada el