Más bien, al vivir la verdad con amor, creceremos hasta ser en todo como aquel que es la cabeza, es decir, Cristo. Por su acción todo el cuerpo crece y se edifica en amor, sostenido y ajustado por todos los ligamentos, según la actividad propia de cada miembro. Efesios 4:15-16
Todo por lo que has pasado tiene un propósito. Lo que el enemigo planeo para tu mal nuestro Padre lo ha revertido para tu bien. Lo que sentías iba a destruirte te ha fortalecido. Continuar Leyendo »