Si tuvieras una máquina del tiempo y pudieras volver atrás, ¿qué cambiarías?
Tal vez evitarías aquella relación que rompió tu corazón. O no hubieras confiado en quien te traicionó. Quizás te dirías a ti misma que aprovecharas más el tiempo, que valoraras ciertas oportunidades o que fueras más valiente para tomar una decisión importante.
Si pudiéramos cambiar el pasado, muchas de nosotras lo haríamos sin dudar. Pero aquí está la verdad: por más que lo pensemos, no podemos regresar. Y quedarnos atrapadas en lo que pudo haber sido solo nos impide avanzar.
Es fácil mirar atrás y ver un cementerio de sueños enterrados, promesas incumplidas y oportunidades perdidas. Pero si sigues viviendo en lo que ya pasó, jamás caminarás hacia lo que Dios quiere hacer en tu vida hoy.
El enemigo quiere que mires atrás y te quedes atrapada en el remordimiento, la culpa y el «¿qué hubiera pasado si…?». Quiere que revivas tus fracasos, que te sientas condenada por errores pasados, que dudes de que Dios tiene algo mejor para ti.
Pero el pasado no tiene poder sobre ti cuando caminas en la verdad de Dios.
La esposa de Lot miró atrás y quedó paralizada. ¿Cuántas veces nos pasa lo mismo?
Nos aferramos a lo que conocíamos, aunque nos estaba dañando. Nos aferramos a relaciones, oportunidades o temporadas de nuestra vida, cuando Dios nos está llamando a algo mayor.
Pero el pasado no puede definir tu futuro si decides soltarlo.
Isaías 43:18-19 dice:
«No recuerden lo que pasó antes ni piensen en el pasado. Fíjense, voy a hacer algo nuevo. Eso es lo que está pasando ahora. ¿No se dan cuenta?»
Dios está haciendo algo nuevo en tu vida. Pero para verlo, necesitas soltar el peso de lo que fue y decidir mirar hacia adelante.
Yo sé lo que es vivir atrapada en el pasado, esperando que algo cambiara para poder seguir adelante. Creí que mis errores definían mi futuro, que lo que perdí nunca regresaría, que mi historia estaba condenada al fracaso.
Pero descubrí que, aunque a veces la vida parece injusta y los intentos fallidos pueden desanimarnos, Dios tiene el poder de hacer nuevas todas las cosas. Lo que pensé que era mi final, Dios lo usó como un nuevo comienzo. Me llevó en un proceso de sanidad, restauración y libertad en el que aprendí a soltar el pasado para caminar con propósito hacia lo nuevo.
Y fue ahí donde entendí esta oración:
«Señor, hoy decido dejar atrás lo que ya pasó.
Tú conoces mis pensamientos y las veces que he querido volver atrás, cambiar decisiones, corregir errores o aferrarme a lo que ya no está. Pero hoy, en lugar de mirar al pasado, elijo confiar en lo que tienes por delante para mí.
Dame la fe para caminar en lo nuevo sin miedo ni dudas. Ayúdame a soltar la culpa, la tristeza y la nostalgia de lo que fue, para recibir con alegría lo que Tú estás haciendo en mi vida.
Declaro que mi futuro está en Tus manos y que lo mejor aún está por venir.
Ese fue mi proceso, y es por eso que escribí Mujer Totalmente Nueva.
Este libro es una invitación para ti, para que descubras cómo soltar el pasado de una vez por todas, cómo sanar verdaderamente y cómo recibir la restauración que Dios tiene para ti.
Descúbrelo en mujertotalmentenueva.com
Dios no está llamándote a revivir el pasado. Está llamándote a caminar con fe hacia lo que está por venir.
Porque aunque no puedas volver atrás, Dios puede redimir cada momento y convertirlo en parte de Su propósito para tu vida.
con amor y oraciones,
Magie de Cano
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