Tú guardas en completa paz a quien siempre piensa en ti y pone en ti su confianza. Confíen siempre en el Señor, porque él es la Roca eterna. Isaías 26: 3-4
El Señor opera desde la quietud y la paz. Quizás ahora mismo estás subido en la barca en medio de una gran tormenta, prepárate, estás a punto de llegar a puerto seguro, mientras eres perfeccionado y entrenado para echar toda tu ansiedad sobre El. Muchas veces en estos tiempos pensamos o sentimos que Dios se alejó de nosotros y que no le importa lo que nos pase. ¡Cuando El está en silencio siempre está trabajando! Pero quiere enseñarte a descansar en El. (Marcos 4:35-41)
El Señor dice:
El caos, la confusión y la desesperación son señales de que el enemigo está trabajando en tu entorno. Rehúsate a permitir que algo interrumpa tu paz y tu fe. Necesitas estar calmado y tranquilo internamente y permitir que Mi presencia y Mi poder impregnen tu atmósfera. Defiende tu posición y mantén todo lo que es bueno, dice el Señor.
Estás transicionando a un tiempo que finalmente será muy diferente comparándolo a donde has estado. No te aferres al pasado y avanza con expectativa. La simpleza será la orden del día mientras te estableces en una mayor libertad espiritual, dice el Señor. Déjame guiarte. Calla tu alma y pide Mi sabiduría y dirección antes de hacer algo que puedas lamentar. Toma este tiempo para acercarte a Mi y permanecer cerca, de modo que puedas seguir en el curso.
Rehúsate a permitir que tus emociones te guíen, dice el Señor. De otra manera, te alejarás de lo que es correcto y lo que tiene propósito. No te desesperes cuando las cosas parezcan no estar funcionando para ti. Rehúsate a hablar negativamente sobre tus circunstancias o descorazonarte, sino que espera por Mi dirección. Yo te mostraré la manera en la que puedes hacer correcciones de curso para alcanzar tu victoria, dice el Señor. Permite que la fe, la esperanza y el amor sean tu fortaleza.” (Bill y Marsha Burns)
Isaías 26: 3-4 Tú guardas en completa paz a quien siempre piensa en ti y pone en ti su confianza. Confíen siempre en el Señor, porque él es la Roca eterna.
Isaías 26:12-13 y 20 Tú, Señor, nos harás vivir en paz, porque tú nos has ayudado a realizar todas nuestras obras. Dios y Señor nuestro, otros señores han querido dominarnos, pero nosotros sólo invocamos tu nombre. 20 ¡Vamos, pueblo mío, entra en tu aposento y cierra tras de ti la puerta! ¡Escóndete por un breve instante, hasta que haya pasado la indignación!
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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