Entonces dijo el Señor a Moisés: ¿Por qué clamas a mí? Di a los hijos de Israel que se pongan en marcha. Éxodo 14:15
Dios había sido fiel con el Pueblo de Israel, estaban al borde del mar rojo, a punto de cruzarlo y de ver con sus propios ojos lo imposible suceder. Uno de sus mayores problemas era la duda y el temor, estaban quejándose con Moisés por haberlos traído hasta allí, y habían quitado su mirada del Dios Todopoderoso que había hecho milagros tan sobrenaturales por ellos. Entonces Dios le dijo a Moisés: “Dile al pueblo que marche”, ni siquiera Moisés sabía para donde había que marchar, si lo que tenía frente a él era el mar.
La parte de Dios estaba hecha, ahora ellos tenían que hacer su parte, ahora debían dar el paso de fe y avanzar hacia la tierra prometida. Es lo que Dios está ahora demandando de nosotros. ¿Crees en Mi? ¿Crees en lo que Yo puedo hacer por ti? Entonces da el paso de FE y comienza a marchar. La fe verdadera no es una ilusión ni es el simple deseo de que todo salga bien. Es una convicción absoluta de que Dios está profundamente interesado en nosotros y que siempre nos dará lo que más nos convenga. Hebreos 11:1 dice: Ahora bien, la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. John Eckhardt compartió hoy esta revelación y sé que es Dios hablando, Dios ha hablado de cambios, de transición, de nuevos comienzos, así que debemos marchar con el conocimiento que nuestro Rey marchará con nosotros a la cabeza.
Miqueas 2:13 Dios irá abriéndoles camino, y ellos le seguirán y saldrán por la puerta de la ciudad. Su rey, el Señor, marchará al frente de todos.
Recibamos nuestras órdenes de marchar en marzo. Marzo será un mes de órdenes divinas. Preparemonos para recibir “Instrucciones Divinas” sobre lo que debe hacer en la próxima temporada. Las órdenes de marchar son instrucciones de alguien en autoridad sobre lo que se debe hacer. Porque marzo será un mes para caminar o proceder rápidamente y con determinación.
Israel recibió órdenes de marchar para salir de Egipto. Para muchos la orden de marchar será abandonar los lugares de servidumbre y mudarse a la libertad. Israel marchó de Egipto hacia el desierto. Luego marcharon hacia la tierra prometida. Recibamos Sus órdenes del cielo. Marchemos para salir de la esclavitud. Marchemos hacia la libertad. Faraón marchó detrás de Israel, pero fue destruido en el mar rojo. Cualquier cosa que este marchando detrás de nosotros para hacernos volver atrás, será destruida cuando obedezcamos la orden de marchar hacia la libertad.
Muchos marcharán a través de su mar rojo. Marcharán en tierra firme. Su enemigo no será capaz de seguirlos en esta marcha. Porque muchos, marcharán de sus lugares de desierto hacia una tierra que fluye leche y miel. Muchos comenzarán a marchar de los lugares antiguos, hacia un lugar nuevo de prosperidad y abundancia.
Cuando ellos marcharon hacia la tierra prometida, se les dijo que marcharan alrededor de Jericó. Para muchos, los lugares en donde han estado encerrados caerán mientras marchan. A Israel se le dijo que marchara por toda la tierra y la poseyera. Debían poseer cada lugar en donde pisaran sus pies. Esta es la marcha de la posesión. Judá condujo la marcha hacia la tierra prometida. Sus alabanzas van a liderar la marcha. Josué lideró la marcha. Ahora, Jesús nos lleva a tomar nuestras posesiones. El enemigo caerá mientras marchamos detrás del Señor. El enemigo será expulsado mientras marchamos.
Creamos a Dios en marzo. Marchemos en fe. Marchemos en poder. Marchemos en autoridad. Marchemos en unidad. Marchemos hacia sus promesas. Marchemos hacia nuestro destino. Marcha hacia nuestro futuro. Marchemos hacia adelante. Marchemos de lo viejo a lo nuevo. Tomemos nuestro lugar en la marcha.
Éxodo 14:29-31 Mas los hijos de Israel pasaron en seco por en medio del mar, y las aguas les eran como un muro a su derecha y a su izquierda. Aquel día salvó el Señor a Israel de mano de los egipcios; e Israel vio a los egipcios muertos a la orilla del mar. Cuando Israel vio el gran poder que el Señor había usado contra los egipcios, el pueblo temió al Señor, y creyeron en el Señor y en Moisés, su siervo.
Hebreos 11:29-30 Por la fe pasaron el mar Rojo como por tierra seca, y cuando los egipcios lo intentaron hacer, se ahogaron. Por la fe cayeron los muros de Jericó, después de ser rodeados por siete días.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
Recibe la palabra profética en tu correo electrónico.
