UNA PAUSA CON UNA CAUSA DIVINA

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UNA PAUSA CON UNA CAUSA DIVINA

En este momento, en todo el mundo, muchos están encerrados en sus hogares esperando que pase esta pandemia, y si bien es cierto, esta es realmente una obra del enemigo, Dios la está usando para nuestro beneficio. Hay un despertar masivo en todo el mundo, y los corazones se están volviendo hacia El hoy más que nunca. Es simplemente UNA PAUSA con una CAUSA DIVINA. Lo que significa que Dios está presionando el botón de pausa en las áreas donde hemos estado ocupados y atrapados en tantas cosas, que posiblemente El quiere cambiar en nuestras vidas.

A veces, “OCUPADO” es el mecanismo de escape y la forma en que huimos de tratar con estas áreas a las que Dios quiere traer libertad, y en este momento esta pausa nos ha hecho detenernos, para dejar que el Espíritu Santo nos mantenga quietos y nos recalibre. De lo que quizás no se dan cuenta es que, esta no es una temporada de desperdicio, sino una oportunidad para salir de la rutina en la que el enemigo ha querido que nos quedemos atrapados.  Esta pausa simplemente ha expuesto las áreas dónde el enemigo nos ha estado trabajando hasta los huesos, por medios religiosos, manteniéndonos cansados, agotados y en una rutina sin amor y sin vida.

Entonces, aunque tal vez han estado viendo este momento como un aislamiento, Dios quiere mostrarles que en realidad es su emancipación. Así que, yo profetizo que ahora mismo Dios les trae plenitud y libertad, rompiendo los yugos pesados ​​de su espalda y limpiando las áreas de trabajo en su vida, para que encuentren de nuevo la alegría que se han estado perdiendo. (Nate Johnston)

Isaías 40:3-8 Una voz proclama: «Preparen en el desierto un camino para el Señor; enderecen en la estepa un sendero para nuestro Dios. Que se levanten todos los valles, y se allanen todos los montes y colinas; que el terreno escabroso se nivele y se alisen las quebradas. Entonces se revelará la gloria del Señor, y la verá toda la humanidad. El Señor mismo lo ha dicho». Una voz dice: «Proclama». «¿Y qué voy a proclamar?», respondo yo. «Que todo mortal es como la hierba, y toda su gloria como la flor del campo. La hierba se seca y la flor se marchita, porque el aliento del Señor sopla sobre ellas. Sin duda, el pueblo es hierba. La hierba se seca y la flor se marchita, pero la palabra de nuestro Dios permanece para siempre».

Con amor y oraciones,

Magie de Cano

 

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Magie de Cano

Por Magie de Cano

Pastora y Conferencista Internacional en el Ministerio de la Mujer, autora del devocional profético Las Cartas de Magie y de los libros “Conquista tu Matrimonio”, “Cita con tu Destino”, "De la Verguenza a la Victoria" y "Una Madre de Rodillas".