Pues tantas como sean las promesas de Dios, en Él todas son sí; por eso también por medio de Él, Amén, para la gloria de Dios por medio de nosotros. 2 Corintios 1:20
Este es el momento de alinear tu corazón y mente con las promesas de Dios. Acepta Su Palabra y mantente firme en la fe. No te desanimes por los desafíos que puedan surgir en el camino. El viaje de las reversiones divinas puede requerir perseverancia y paciencia, pero el resultado final valdrá la pena. Mantén tus ojos puestos en Jesús, el autor y perfeccionador de tu fe, y confía en que Él te está guiando hacia una temporada de avance sin precedentes. Así que, abraza este tiempo de reversiones divinas con esperanza y expectativa. Permite que Dios cambie tus circunstancias y manifieste Sus propósitos en tu vida. Entra en la plenitud de Sus bendiciones y observa cómo transforma cada área de tu vida para Su gloria.
La temporada de puertas cerradas y oraciones no respondidas está llegando a su fin. El Señor, tu Dios, que ve todas las cosas, está declarando un nuevo amanecer sobre tu vida. Por cada puerta que se cerró en tu cara, por cada oportunidad que se te escapó de las manos, Él ahora está orquestando una reversión divina.
He aquí, el Dios que hace camino en el desierto y ríos en la tierra estéril está transformando tus puertas cerradas en oportunidades frescas e inéditas. Donde una vez hubo rechazo, habrá aceptación. Donde hubo escasez, la abundancia rebosará. Donde hubo desesperación, la esperanza se levantará como el sol de la mañana.El Espíritu del Señor te dice: “No soy hombre para que mienta, ni hijo de hombre para que cambie de parecer. Si he hablado, lo cumpliré. Si he prometido, lo cumpliré.” Tu espera no ha sido en vano; ha sido una preparación. Tu lucha no ha pasado desapercibida; ha sido un refinamiento.
Prepárate, porque las puertas que una vez fueron barreras ahora se convertirán en portales hacia tu destino. Caminarás a través de puertas que ningún hombre puede cerrar, porque las llaves de David están en las manos de tu Rey. No temas, ni te desanimes, porque el Señor tu Dios está contigo dondequiera que vayas. Levanta tus ojos y ve el nuevo horizonte. Lo que una vez fue imposible ahora está a tu alcance. Lo que una vez fue un sueño lejano ahora se está convirtiendo en tu realidad. ¡Abraza el cambio divino, porque tu Dios está transformando tus puertas cerradas en nuevas y gloriosas oportunidades! (Charlie Shamp)
Numeros 23:19 Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre, para que se arrepienta. ¿Lo ha dicho Él, y no lo hará?, ¿ha hablado, y no lo cumplirá?
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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