Yo les respondí: “El Dios de los cielos es quien nos ayuda. Nosotros, sus siervos, hemos decidido reconstruir las murallas, y lo vamos a hacer. Ustedes no tienen ninguna autoridad, ni arte ni parte en Jerusalén.” Nehemías 2:20
Un día mientras oraba, escuché al Señor decir: «Estoy derramando una unción de Nehemías sobre Mi pueblo. Están entrando en una temporada de gran aceleración. Estoy pasando la página, y ahora es tiempo de la acción. Donde ha habido estancamiento o progreso lento, pueden esperar un impulso de avance. Mi pueblo elegido está siendo impulsado hacia los planes y propósitos que tengo para ellos. Han sido ungidos para este momento. Mi Palabra se cumplirá tal como lo he prometido. Nuevos comienzos están en el horizonte, y las visiones pasadas están siendo restauradas. De hecho, este es el tiempo para un REINICIO, RESURRECCIÓN y AVIVAMIENTO DIVINOS. ¡Estoy declarando a Mis amados que esta es su porción!»
Un manto poderoso está descendiendo sobre muchos en esta temporada. Algunos aspectos de su vida les han traído vergüenza y reproches, pero Dios dice: «Reconstruirán desde las ruinas del desengaño. Las cadenas de la vergüenza y el reproche se están rompiendo. Los estoy levantando de copero a constructor». Cuando escuché al Señor decirme esto, me enfoqué inmediatamente en las promesas de la “UNCION DE NEHEMIAS” y la gran aceleración. Estudié diligentemente el Libro de Nehemías y recibí una revelación que los lanzará hacia la temporada de gran aceleración.
FAVOR: Dios hizo que el Rey de Persia favoreciera y financiara la tarea que Dios le había dado a Nehemías. Dios también está haciendo que las personas correctas los favorezcan a ustedes. Él los está conectando con los recursos que proveerán para su visión. No les faltará nada.
CONFIANZA EN EL LLAMADO DE DIOS: Nehemías estaba seguro de que la mano de Dios estaba sobre él y de que había sido escogido para esta importante tarea. De la misma manera, una ola fresca de confianza está surgiendo en ustedes. Prepárense para presenciar milagro tras milagro desplegarse en su vida.
FUERZA PARA PERSEVERAR: Él desestimó las amenazas, persecuciones y distracciones a su alrededor. Incluso cuando otros persistentemente le instaban a bajar y reunirse con ellos, Nehemías permaneció firme en su puesto, enfocado en su tarea. De la misma manera, no se entretengan con aquellos que buscan distraerlos, porque el Señor los ha equipado para esta temporada.
PODER PARA VENCER: Nehemías venció la oposición mediante la oración. ¿Quiénes serán los que avancen en esta temporada de aceleración? ¡Serán los intercesores! Se levantarán con fuerza, sabiendo que Dios está luchando por ellos.
Además, siento que el Señor dice: «Muchos de ustedes se han sentido estancados y no están conscientes de que una nueva temporada ha comenzado. YO ESTOY TRABAJANDO ACTIVAMENTE A SU FAVOR. Este es un tiempo de avance significativo. Aprovechen esta oportunidad. Los prosperaré mientras sigan Mis instrucciones. No permitan que los murmullos demoníacos y las amenazas del enemigo los distraigan. Este es el momento para que ustedes, Mi Iglesia, se levanten y edifiquen. Incluso cuando su entorno parezca sombrío, ustedes son el faro de esperanza. Resistan la tentación de sucumbir a la oscuridad. ¡Dejen que su luz resplandezca! ¡Levántense! ¡Tomen acción! Y como Nehemías, ¡Construyan el muro!
Nehemías 6:15 La muralla se terminó el día veinticinco del mes de elul. Su reconstrucción había durado cincuenta y dos días.
En la historia de Nehemías, la unción permitió que lo que parecía imposible se lograra en solo 52 días. Dios está liberando esa misma aceleración milagrosa en su vida. Los obstáculos que los han frenado y los han hecho sentir estancados están siendo destrozados, y Dios los está impulsando hacia adelante sobrenaturalmente. Aquellos que dudaron de su visión y se opusieron a sus promesas serán testigos del asombroso trabajo que Dios está haciendo a través de ustedes, dejándolos sin palabras. La unción de aceleración está siendo generosamente derramada sobre ustedes por Dios. Su Espíritu está soplando sobre su vida y reclamando el tiempo perdido.
Nehemías 6:16 Cuando todos nuestros enemigos se enteraron de esto, las naciones vecinas se sintieron atemorizadas y humilladas, pues reconocieron que ese trabajo se había hecho con la ayuda de nuestro Dios.
Escuché al Señor declarar: «Les estoy restaurando el tiempo perdido.» Sus palabras me recordaron un vuelo que tomé recientemente. Después de un agotador fin de semana de ministerio, me apresuré por el aeropuerto hacia la puerta de embarque. Justo cuando me senté, el agente de la puerta anunció un retraso. Aproveché la oportunidad para tomar un refrigerio, preparándome para lo que pensé que no sería una larga espera. Sin embargo, para mi sorpresa, llegó otro anuncio, extendiendo el retraso una vez más. La frustración comenzó a aumentar entre los pasajeros, incluido yo. Luego, un tercer anuncio confirmó que nuestro vuelo aún estaba retrasado, y la gente comenzó a amontonarse alrededor de los agentes de la puerta, preguntando por los nuevos horarios de salida y sus conexiones de vuelo.
Justo cuando me resignaba a esperar mucho tiempo, sonó la llamada para abordar por los altavoces. Una vez a bordo del avión y alejado de la puerta, el piloto habló a todos los pasajeros, disculpándose por los retrasos y tranquilizándonos, diciendo: «No tienen que preocuparse por sus conexiones. Las ráfagas de viento nos ayudarán a recuperar el tiempo perdido en el aire, y llegaremos según lo programado.»
¡Las ráfagas de viento del Espíritu Santo también los harán llegar a tiempo! Esta es la hora en que Dios está derramando Su unción sobre ustedes para acelerarlos. Su Espíritu está soplando a través de su vida, redimiendo el tiempo perdido. No se angustien, así como los fuertes vientos en el reino natural guiaron mi avión hacia su destino justo a tiempo. ¡Amigos míos, ustedes también llegarán a su hora señalada! (Una palabra de Andrew Towe)
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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