Escuché al Señor decir: «Estoy haciendo ajustes en algunos planos. Prepárate para cambiar de rumbo y ven Conmigo.» Entonces, el Salmo 32:8-9 me rodeó: «Te guiaré por el mejor sendero para tu vida; te aconsejaré y velaré por ti. No seas como el mulo o el caballo, que no tienen entendimiento, que necesitan un freno y una brida para mantenerse controlados».
Mientras me postraba y escuchaba al Señor, Él dijo: «Acepten los ajustes, que estoy haciendo en esta hora a algunos planos que les he dado. Continuar Leyendo »