Mira, hoy te he dado autoridad sobre las naciones y sobre los reinos, Para arrancar y para derribar, Para destruir y para derrocar, Para edificar y para plantar. Jeremías 1:10 NBLA
Tengo una palabra para aquellos que han estado escondidos al margen durante mucho tiempo. Ustedes han sido los sin facción, aquellos que no encajan del todo en la estructura, metodología y cultura actual de la iglesia simplemente porque llevan algo diferente. Han estado en un proceso donde el Señor les ha estado animando a dar un paso adelante y ser una voz, pero han sabido que hay un tiempo adecuado para ello. Han estado esperando con ternura que el Señor los libere y les dé luz verde. Han sido pacientes, sin apresurarse ni forzar puertas.
Durante los últimos cuatro años, el Señor ha estado añadiendo capa tras capa a los planos de construcción dentro de ustedes. Han estado preguntando: “Señor, ¿cuándo podré comenzar a caminar en esto?” Este año ha estado marcado por una batalla contra su confianza. Han surgido preguntas, sentimientos de haber perdido su momento y una sensación de que tal vez no entraron en el tiempo correcto o de que la visión está estancada. Pero no está estancada.
Estás a punto de entrar en el cumplimiento de lo que Dios ha puesto dentro de ti. Estás pasando de lo teórico a lo práctico, comenzando activamente a construir lo que Dios te ha llamado a hacer. Déjame decir esto con humildad: no se trata de que estés reemplazando lo que Dios ha hecho; estás añadiendo una extensión a la casa pura. Dios ha estado juzgando y revelando la impureza de la vieja casa, que ha quedado en ruinas y escombros.
Aquí es donde tú entras, porque Dios te ha llamado Su remanente, Su remanente profético que no ha doblado rodilla ni besado los labios de Baal. Has sido apartado con un propósito, por una razón y para una temporada. Ahora es el momento de construir. El Señor te ha estado sacando de las sombras, desafiándote a comenzar a establecer una nueva compañía y un nuevo pueblo.
Has estado buscando personas, pero el Señor dice: «En lugar de buscar, tú las construirás. Serás la familia. Serás padre y madre para un pueblo que necesita este nuevo movimiento.» Estamos dejando atrás los días de la casa profética como una casa de celebridades. El Señor está guiando a la Iglesia fuera del enfoque en las celebridades hacia una temporada en la que la compañía profética será sin nombre ni rostro. Dios está llamando a toda la Iglesia a su destino profético, donde todo el Cuerpo lo escuchará como si fuera la primera vez.
La Iglesia está entrando en su capacidad de interactuar con lo celestial y liberar el Cielo en la tierra. Ya no será solo para unos pocos selectos, sino para una NOVIA PURA con una voz colectiva. Y escucho al Señor decirles a aquellos que están construyendo lo nuevo: “”Es tiempo de comenzar a enfocarse en lo que está por delante e ignorar el ruido de los críticos que los difaman para impedir que construyan”.
En los próximos seis meses, parecerá que los críticos surgen por todas partes para desanimarte de colocar los primeros ladrillos de lo nuevo que has estado soñando y procesando con el Señor durante los últimos siete a catorce años. Así es, esto ha estado en tu espíritu durante 7 a 14 años. En los últimos cuatro años, has soportado la fase de oposición de Nehemías 4, donde sentiste que había una batalla total para impedir que dieras a luz lo que Dios colocó en tu corazón. Pero ahora viene sobre ti una gracia para reunir el barro, formar el primer ladrillo, despejar el terreno, colocar la base y establecer el fundamento.
Este es un momento de gracia y favor en lo que parece ser un tiempo equivocado. Sin embargo, el Señor dice: “Este no es el tiempo equivocado; es el tiempo oportuno. Es el momento correcto para establecerlo”. Así como a Zorobabel se le dio la autoridad para colocar la piedra angular, el Señor te está entregando Su anillo de sello: Su autoridad, favor y unción para establecer el fundamento del nuevo mover de Dios, sin mancha, arruga ni compromiso.
Zacarías 4:6-7 NTV Entonces me dijo: —El Señor dice a Zorobabel: No es por el poder ni por la fuerza, sino por mi Espíritu, dice el Señor de los Ejércitos Celestiales. Nada impedirá el camino de Zorobabel, ni siquiera una montaña gigantesca, ¡pues se convertirá en llanura delante de él! Y cuando Zorobabel coloque la última piedra del templo en su lugar, la gente gritará: ¡Dios lo bendiga! ¡Dios lo bendiga!
Habrá gritos de muchos lados, tormentas que intentarán arrastrarte y ruido buscando distraerte. Pero el Señor dice: “Este es un momento en el que quiero que te humilles y construyas. Quiero que enfoques tu mirada únicamente en Mi rostro y en nada más. Avanza a través del ruido y comienza a establecer lo que te estoy dando. Esta es la misión que he puesto en tus manos, y hay una unción sobre ti para superar lo que parece una hazaña imposible».
Yo proveeré la claridad, la provisión y las personas que necesitas. Pero presta atención a esta advertencia: conoce tu lugar, entiende lo que te he dado para hacer y reconoce tus herramientas. No te involucres en nada fuera de lo que he puesto en tus manos. Así como los profetas se acercaron a Eliseo y dijeron: «Este lugar es demasiado pequeño» y comenzaron a construir y perdieron el hacha porque era prestada. (2 Reyes 6:1-7)
Este es un tiempo de gran humildad mientras construyes. Es un tiempo para descender al Jordán, el lugar del fluir y la renovación. Debes construir en el Espíritu, no en la carne, para no repetir los errores del pasado. Entra en el nuevo fluir del Espíritu, porque las aguas están subiendo, y el Señor está buscando a aquellos que prepararán al Cuerpo de Cristo para la gran cosecha. En esta hora, el Señor está levantando profetas de transición y apóstoles de transición para guiar a la Iglesia hacia un nuevo día, fuera de los escombros.
Los próximos seis meses revelarán muchos escombros, pero Dios está levantando especialistas que sabrán cómo moldearlos, crear con ellos y usarlos para lo nuevo que Él está construyendo. ¡LO MEJOR ESTA POR VENIR! (Una palabra de Nate Johnston)
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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