«La gloria postrera de esta casa será mayor que la primera» —dice el Señor de los ejércitos— «y en este lugar daré paz» —declara el Señor de los ejércitos. Hageo 2:9
Sentí un toque en mi costado, suave pero firme, mientras dormía. Me despertó a las 4:40 a.m. Supe que era el Señor. Inmediatamente supe que el Señor está despertando a Su Iglesia. Nos está despertando a lo que está por venir: UNA GLORIA MAYOR. El Señor comenzó a hablar, diciendo que ha habido una contienda por nuevos territorios. Con ello ha venido una intensa resistencia del enemigo contra el pueblo de Dios a través de problemas de salud inesperados, contratiempos financieros, divisiones familiares, extraños accidentes, engaños doctrinales y más.
Escuché la Escritura que dice: «Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; (1 Pedro 5:8). Luego escuché al Señor decir: «Muchos de Mis líderes y precursores están ebrios, no de vino, sino de desesperanza, desánimo e indecisión». Realmente hay un diablo acechando como león rugiente, buscando a quien devorar. Pero Jesús nos ha dado el antídoto para esta temporada: Manténganse sobrios. La palabra «SOBRIOS» significa hacerse o volverse más serios. Creo que el Señor nos llama a ser serios, serios en cuanto al avance, serios en cuanto a expulsar al enemigo, serios en cuanto a la esperanza, la fe y recuperar nuestra tierra.
ES TIEMPO DE ASALTAR EL CAMPAMENTO DEL ENEMIGO
Recordé la vieja canción «Campamento del Enemigo» (de Lindell Cooley): «Fui al campamento del enemigo, y tomé de vuelta lo que me había robado». Es tiempo de que el Cuerpo de Cristo avance, no solo se mantenga firme. Debemos exigir la devolución de lo que ha sido robado y creer en una restauración siete veces mayor.
Proverbios 6:31 Pero si lo atrapan, deberá pagar siete veces la cantidad que robó, aunque tenga que vender todo lo que hay en su casa.
Le pregunté al Señor acerca de lo que hemos estado viendo en el Cuerpo de Cristo. Él me recordó una percepción espiritual que me dio hace muchos años. Se encuentra en Apocalipsis 12:12: «¡Ay de la tierra y del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, sabiendo que tiene poco tiempo» (NVI, corchetes míos). El Señor me mostró que una de las estrategias del enemigo es enviar vigilantes espirituales en misión para perturbar matrimonios, salud, finanzas y unidad, tratando de obstaculizar la obra de Dios.
Mientras intercedía recientemente por nuestra región, vi claramente en el espíritu el caos que había sido liberado en el aire sobre nuestras iglesias, familias y líderes. Guiada para cancelar estas asignaciones y ordenar a estos vigilantes espirituales que regresaran a donde habían venido, pedí a los ángeles de Dios librar la batalla a nuestro favor. Instantáneamente, vi una visión de ese espíritu huyendo hacia las montañas.
DOMINA EN MEDIO DE TUS ENEMIGOS
Permíteme recordarte: Hay más a favor nuestro que en contra. Estamos en una guerra espiritual, pero es una guerra que ya ha sido ganada. Debemos seguir recuperando el terreno que el enemigo ha intentado robar. Demandemos aumento en nuestra tierra, golpeemos el suelo para la cosecha y roguemos la sangre de Jesús sobre regiones y naciones.
Este es el tiempo en la que veremos al enemigo retroceder, veremos los ambientes cambiar y las oraciones de los santos ser respondidas. Mantengámonos sobrios y vigilantes. Somos la gloriosa Iglesia, sin mancha ni arruga. Debemos despertarnos y ejercer la autoridad que se nos ha dado para gobernar en medio de nuestros enemigos. (Una palabra de Danielle Dixon)
Salmo 110:2 El Señor extenderá desde Sion el poder de tu cetro. Domina tú en medio de tus enemigos.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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