Luego dijo Jesús: «Vengan a mí todos los que están cansados y llevan cargas pesadas, y yo les daré descanso. Mateo 11:28
Escuché al Espíritu del Señor diciendo: «¡Pioneros, es tiempo de recuperarse del agotamiento y estar completos en el alma!» Han trabajado fielmente, pero muchos han seguido tirando del carro en lugar del caballo (La fuerza del Espíritu Santo). En esta temporada, muchos de ustedes han continuado bailando al borde del agotamiento. Han estado cavando más profundamente aun con cansancio, mientras que el llamado de 2024 era entrar en el descanso. Han intentado avanzar a la fuerza, pensando que podrían seguir adelante con su propia voluntad. Pero el Señor nos está recordando a todos nuevamente en este momento: «Suban al monte. Asciendan al monte del Señor y encuentren Mi descanso nuevamente.» (Salmo 24)
En lugar de soltar sus cargas pesadas, han recogido más. En lugar de rendirse en el altar, han estado esforzándose desde un estado de quebrantamiento. Pero escucho el corazón del Padre clamando por ustedes: «¡Recupérense!» No están llamados a agotarse en esta temporada; están llamados a prosperar en su alma.
EL LLAMADO A DESCANSAR Y RECUPERARSE
El Señor les está dando permiso para detenerse, soltar el peso de sus asignaciones y enfocarse en recuperar su alma. Él dice: «Tu primer llamado no es al trabajo del ministerio; es a Mí. Tu primera prioridad no es tu asignación; es vivir para Jesús y estar completo.»
¿Cómo puedes salvar o liderar a otros si te estás matando en el proceso? ¿Cómo te beneficia a ti —o a la próxima generación— morir prematuramente, física o espiritualmente, o perder tu fe bajo el peso de las expectativas de las personas o tratando de mantener tu reputación? El Señor dice: «Es tiempo de recuperar tus fuerzas.»
La nueva asignación te está esperando, pero no entres en ella corriendo con el tanque vacío. No es noble de tu parte sacrificar tu bienestar por el bien de la máquina del ministerio. ¡Quema el becerro de oro y recupérate! Este es el tiempo para prosperar en tu alma y realinearte con el corazón del Padre para ti.
Muchos de ustedes han estado apenas funcionando, sobreviviendo con revelaciones viejas, con maná de temporadas pasadas, pero el Señor los está invitando a deleitarse nuevamente en la Palabra fresca del Cielo. Han estado intentando mantener todo unido con información limitada o caducada, pero escucho al Señor decir: «Es tiempo de prosperar, no solo sobrevivir, y es tiempo de entrar en una nueva comprensión y revelación de quién Soy y quién eres.»
¡Sí! ¡Es tiempo de matar de hambre la ansiedad encontrando nuevamente tus pies en Jesús! La ansiedad te ha drenado, pero al adentrarte en Su presencia nuevamente, encontrarás seguridad. Algunos de ustedes han perdido su lenguaje. ¡Nosotros hemos perdido nuestro lenguaje! La batalla nos ha desgastado y nos ha hecho perder el diálogo. ¡Pero está volviendo! Bajo el peso de la ocupación y la fatiga, lo han visto caer de sus manos, pero el Señor está diciendo: «¡Es tiempo de reavivar la llama de la intimidad Conmigo! Y es tiempo de profetizar desde un lugar fresco. ¡Desde la paz! No desde el miedo. No desde el dolor. ¡Sino con CLARIDAD nuevamente! ¡Para que fluya de ti como un manantial fresco de agua en el desierto!
LIDIANDO CON EL AGOTAMIENTO DEL ALMA Y PROBLEMAS DE SALUD
Muchos pioneros no solo han experimentado agotamiento, sino también luchas de salud física que están vinculadas a este agotamiento profundo del alma. El estrés crónico, la ansiedad y la tensión emocional se han manifestado en diversas dolencias físicas, dejando a muchos sintiéndose débiles tanto en cuerpo como en espíritu. La conexión entre el alma y el cuerpo es innegable, y el Señor está abordando estos problemas subyacentes.
El Señor dice: «Veo el impacto que este viaje ha tenido en tu cuerpo. Veo cómo el agotamiento te ha hecho vulnerable a enfermedades y fatiga. Pero Yo soy el restaurador de tu alma y tu salud. Mientras descansas en Mí, traeré sanidad no solo a tu espíritu, sino también a tu cuerpo.»
Este no es solo un tiempo de recuperación espiritual, sino también un tiempo para la renovación física. Este agotamiento ha llevado a menudo a sentimientos de aislamiento profundo y desesperación, con muchos creyendo que están solos en sus luchas. El Señor te está llamando a salir de este aislamiento al mismo tiempo que te libera del agotamiento, donde las personas te agotaron y te empujaron más hacia el escondite.
Muchos de ustedes han creído la mentira de que su unción se ha ido, que las batallas y la guerra mental que han enfrentado de alguna manera han despojado el llamado sobre sus vidas. Pero el Señor dice que lo contrario es cierto. Tu unción no se ha desvanecido, ¡solo ha aumentado en esta temporada de lucha y guerra! Pero ¿cómo puedes blandir una espada cuando tu alma está turbia? Las batallas que has estado luchando no son para disminuirte, sino para refinarte y afilarte.
El Señor dice: «Estoy aumentando tu unción, incluso en medio del caos. Estoy refinando tu don y tu llamado. Pero para operar en la plenitud de esta unción, tu alma debe estar clara, tu corazón en paz. Ven a Mí, y deja que despeje la turbiedad. Déjame traer claridad y descanso para que puedas blandir tu espada con fuerza, precisión y poder.»
Pioneros, han estado derramándose desde una copa vacía, y el Señor dice: «Esto debe cambiar.» Él quiere que viertan desde el desbordamiento de Su presencia, desde un lugar de plenitud, no de agotamiento. ¿Cómo? Siéntense a Sus pies, pausen, y hagan de eso su alimento y sustento. Suelten la presión de las multitudes y el ruido constante del mundo. Llenen su copa primero.
Luego llenen las copas que están más cerca de ustedes antes de derramar sobre otros. La familia es su primer ministerio. Dejen que la sanidad y la restauración fluyan a través de su hogar antes de salir a las naciones. El Señor los está llamando a recuperar su alma para que puedan entrar plenamente en las nuevas asignaciones que tiene para ustedes. No se apresuren, no se esfuercen, esperen en el Señor y dejen que Él los restaure. La siguiente fase de su llamado no se cumplirá a través de su propia fuerza, sino a través de Su Espíritu fluyendo a través de ustedes.
El Señor dice: «Pioneros, deténganse y recupérense. Tienen permiso para descansar. Tienen permiso para sanar. Tienen permiso para reabastecerse para el camino que tienen por delante.»
La cosecha es abundante, pero deben prosperar en su alma para llevar el peso del próximo derramamiento. Este no es el momento de avanzar sin fuerzas. Suban al monte, encuentren descanso y prosperen en la presencia del Señor. Desde este lugar de descanso, construirán con facilidad, profetizarán con claridad y liderarán con fortaleza. (Una palabra de Nate Johnston)
Salmo 23:3 Él restaura mi alma; me guía por senderos de justicia por amor de su nombre.
3 Juan 1:2 Amado, ruego que seas prosperado en todo así como prospera tu alma, y que tengas buena salud.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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