ESPERA POR TUS CAMELLOS

Dios mío, ¡tú eres mi Dios! Yo te buscaré de madrugada. Mi alma desfallece de sed por ti; mi ser entero te busca con ansias, en terrenos secos e inhóspitos, sin agua, con deseos de ver tu poder y tu gloria, como los he mirado en el santuario. Salmos 63:1-2

Cuando tenemos una promesa de Dios que se tarda en el cumplimiento Dios nos quiere más cerca de Él. Los tiempos de espera forjan una intimidad más profunda con Dios, es en ese lugar de intimidad que recibimos nuevas fuerzas, fe, esperanza y fortaleza. Continuar Leyendo »

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