Cuando el enemigo venga como una inundación, el Espíritu del Señor levantará un estandarte contra él y lo pondrá en fuga [porque vendrá como un torrente impetuoso que impulsa el aliento del Señor]. Isaías 59:19b AMPC
Aunque muchas personas citan regularmente este versículo en círculos cristianos, muchos de ellos no tienen idea de lo que realmente significa. Este es el único lugar en la Biblia donde esta palabra hebrea se usa de esta manera, porque normalmente un estandarte es una bandera que se levanta como punto de reunión para las tropas en una zona de guerra, pero aquí la terminología es totalmente diferente. Cuando el Señor levanta un estandarte en nuestro favor, el enemigo no solo se “retira” de nosotros; desaparece por completo del campo de batalla y se lleva con él todo lo que nos trajo. Es como el sol brillando en la oscuridad, donde ésta no se retira lentamente, simplemente desaparece por completo debido a la luz que emerge en medio de ella.
Muchas personas con las que he estado en contacto últimamente han estado bajo ataques implacables del enemigo, hasta el punto en que sienten que todo en sus vidas parece estar yendo mal. Las cosas con sus familias, las cosas en su lugar de trabajo e incluso su salud física se han convertido en un desafío para muchos de ellos. Sienten como si el enemigo hubiera llegado “como un torrente”.
Cuando Israel se enfrentó a los carros egipcios y su maquinaria de guerra, parecía que no tenían escapatoria ni posibilidad de retroceder ante los carros avanzados de Faraón. Pero justo cuando parecía que Israel sería aplastado por ellos, Dios no solo les proporcionó una salida de la situación a través de un milagro, sino que también destruyó todo el ejército enemigo de un solo golpe. ¡Él Levantó el Estandarte!
Exodo 14:30-31 En ese día el Señor salvó a Israel del poder de Egipto. Los israelitas vieron los cadáveres de los egipcios tendidos a la orilla del mar. Y al ver los israelitas el gran poder que el Señor había desplegado en contra de los egipcios, temieron al Señor y creyeron en él y en su siervo Moisés.
Cuando el rey Josafat fue rodeado por tres ejércitos mucho más grandes que el suyo, buscó el rostro del Señor, y mientras lo hacía, el Señor tomó el control de la situación al punto de decirle al rey que enviara a los cantantes y adoradores al frente del ejército. Entonces el Señor preparó emboscadas contra los hombres de los tres ejércitos, y esos ejércitos se destruyeron mutuamente en el proceso.
2 Crónicas 20:22 Tan pronto como empezaron a entonar este cántico de alabanza, el Señor puso emboscadas contra los amonitas, los moabitas y los del monte de Seír que habían venido contra Judá, y los derrotó.
Muchos de ustedes que leen esto pueden estar enfrentando circunstancias que se sienten muy similares a una de estas, una situación desesperada en la que se sienten completamente impotentes para cambiar. Sin embargo, a medida que la inundación del enemigo se acerca cada vez más, ¡el Estandarte del Señor se está levantando!
La palabra “ESTANDARTE” aquí literalmente significa “DESAPARECER”. ¡PARA MUCHOS DE USTEDES, LA MAREA ESTÁ A PUNTO DE CAMBIAR! Lainundación está a punto de retroceder y desaparecer debido a la presencia de Dios en sus vidas. Así que hoy, cuando hayan hecho todo lo que pueden hacer, PERMANEZCAN FIRMES Y OBSERVEN LA SALVACIÓN QUE VIENE mientras Su Estandarte se levanta en medio de ustedes y hace que el enemigo se retire completamente, caiga en confusión o se autodestruya por completo. ¿SI DIOS ESTÁ A SU FAVOR, ¿QUIÉN PUEDE ESTAR EN SU CONTRA? (Una palabra profética de Daniel Pontious)
Romanos 8:31 AMPC ¿Qué, pues, diremos a todo esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? ¿Quién puede ser nuestro enemigo, si Dios está de nuestro lado?
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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