Más allá de la puerta abierta

Dios bendice a los que soportan con paciencia las pruebas y las tentaciones, porque después de superarlas, recibirán la corona de vida que Dios ha prometido a quienes lo aman. Santiago 1:12 NTV

Recientemente, me encontré en una situación en la que estaba siendo escudriñada por otra persona debido a un pequeño contratiempo en mi vida. De ninguna manera era algo perjudicial, al menos para mí. En resumen, llegué tres minutos tarde a una cita. Esperaba que se me diera cierta gracia en este asunto, pero para mi sorpresa, recibí una confrontación al respecto. No sabía que estaba retrasando el horario de otra persona ese día. Aparentemente, era un horario importante en el que el tiempo era esencial. Mi carne estaba molesta. Era como si una cuña se estuviera clavando en mi corazón, y esto me molestó el resto del día.

Más tarde, esa noche, compartí casualmente toda la historia con mi esposo y esperaba recibir una buena dosis de empatía. Nuevamente para mi sorpresa, recibí palabras amables de una naturaleza diferente. Él dijo: “Cariño, el tiempo es el único recurso que las personas tienen y que no pueden recuperar una vez que se gasta. Simplemente llega a tiempo a tus citas y esto nunca volverá a suceder”. ¡Fui a mi habitación! Sentada en mi cama, estaba a punto de comenzar a orar cuando sentí esa familiar “urgencia” de agarrar un bolígrafo y papel. ¡El Señor estaba a punto de hablar!

RAICES AMARGAS

Hebreos 12:15 RVC Tengan cuidado. No vayan a perderse la gracia de Dios; no dejen brotar ninguna raíz de amargura, pues podría estorbarles y hacer que muchos se contaminen con ella.

Escuché al Señor decir: “Estoy tratando con raíces amargas y juicios de raíces amargas en esta hora. ¿Te encuentras en medio de presiones o circunstancias ofensivas? ¿Hay personas difíciles que parecen oponerse a ti? Haz una pausa y siéntate en silencio delante de Mí. Expondré con suavidad y amorosidad los problemas del corazón para que puedas ser sanado y experimentar una mayor libertad.”

A menudo, reprendemos al enemigo cuando vienen las pruebas. Sin embargo, el Señor, en Su bondad, permite que surjan situaciones y circunstancias incómodas para que podamos aprender, superarlas y crecer en nuestro carácter. Su gracia es suficiente para ti, y Su poder se perfecciona en tu debilidad (2 Corintios 12:9). Siento el estímulo del Señor para no retroceder ante la presión, sino correr hacia ella y permitir que se cumplan Sus propósitos en ti.

SURFEA LA OLA

Las olas del océano son una fuerza seria de la naturaleza. Nos reímos y disfrutamos cuando nadamos y jugamos con las pequeñas, pero una vez que las olas crecen hasta alcanzar nuestra altura, la dinámica cambia rápidamente. La cantidad de fuerza que llevan crece exponencialmente con su tamaño. A veces, cuando las circunstancias son adecuadas, las olas del océano pueden volverse tan grandes que se colocan señales de advertencia, prohibiendo a cualquiera entrar en las aguas del océano. El pecado y los problemas ocultos del corazón pueden ser como olas del océano. Pueden crecer en fuerza. ¡Si se dejan sin control, la turbulencia seguramente nos llevará bajo el agua!

Escuché al Señor decir: “¡Sé como un surfista habilidoso! Ellos no evitan las olas grandes, sino que pacientemente y con habilidad se mueven en el momento adecuado para atrapar y surfear las olas. En esta vida, vendrán pruebas. Elige ver estas pruebas como una oportunidad para hacer crecer tu fe y tu carácter. Por Mi Espíritu, te estoy entrenando para navegar por los problemas de tu corazón con las circunstancias difíciles y las personas impulsivas que vienen y van en tu vida. Si permites que haga esta poda, serás promovido y aumentarás aún más. Rechaza ceder ante la autocompasión o la desesperación. No creas las mentiras del enemigo que intentara decirte que tu Dios no está contigo. ¡Lo contrario es la verdad! Te amo tanto y no deseo más que lo mejor para ti. Permíteme sanarte para que no te vuelvas amargado. Deseo que seas suave y moldeable en Mi mano.”

UN LLAMADO A OCUPAR LO QUE ESTA MAS ALLA DE LA PUERTA ABIERTA

 Apocalipsis 3:8 NVI Conozco tus obras. Mira que delante de ti he dejado abierta una puerta que nadie puede cerrar. Ya sé que tus fuerzas son pocas, pero has obedecido mi palabra y no has renegado de mi nombre.

El Señor dice: “Hay mucho movimiento y agitación tanto en el cielo como en la tierra. Es el avance de Mi Reino en el ámbito terrenal. Esta agitación derrocará a muchos malvados que estaban en lugares de influencia, tanto grandes como pequeños, visibles y detrás de bastidores. Realmente os digo que derrocar a estos malvados no es suficiente. ¿Ocuparán? ¿Atravesarán la puerta abierta? ¿pelearán por la justicia? ¿Qué reino harán avanzar? Verdaderamente, el momento está aquí. La puerta abierta se presentará. Para algunos, la posición y el llamado requerirán mucho. Para otros, se requerirá menos. Verdaderamente, les pregunto, ¿haran su parte, grande o pequeña, cuando llegue la puerta abierta? Afrontarán la presión y surfearán las olas. Los estoy moldeando en un hermoso instrumento de gracia, y hay grandeza al otro lado. Están irrumpiendo en un nuevo territorio y promoción” (Una palabra de Angie Stolba)

Isaías 45:2-3 NVI Marcharé al frente de ti y allanaré las montañas; haré pedazos las puertas de bronce y cortaré los cerrojos de hierro. Te daré los tesoros de las tinieblas y las riquezas guardadas en lugares secretos, para que sepas que yo soy el Señor, el Dios de Israel, que te llama por tu nombre.

Con amor y oraciones,

Magie de Cano