No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos. Gálatas 6:9
Dios es el Dios de la segunda oportunidad. Él está a punto de restaurarle los años que devoró la langosta. (Joel 2: 18-27) Algunos sufrimientos han sido injustos, pero otros son el resultado de las malas decisiones que hemos tomado. Hoy en día algunos de ustedes están experimentando una cosecha negativa en sus vidas a causa de las malas semillas que fueron sembradas. Cuando tomamos decisiones pecaminosas estamos sembrando semillas negativas en nuestras vidas que finalmente traerán una mala cosecha.
No obstante, servimos a un Dios de la segunda, tercera y cuarta oportunidad. Si usted decide empezar hoy a sembrar semillas buenas en su vida, su cosecha comenzará a transformarse. Dios se dedica a la restauración y el Cuerpo está a punto de experimentar una restauración gloriosa en muchas áreas de nuestras vidas. No siempre podemos recuperar las oportunidades perdidas, pero Dios puede restaurar los años que usted ha perdido y hacer que la gloria tardía en su hogar sea mayor de lo que había sido la anterior.
El Señor dice:
Les gustará mucho el camino que Yo he puesto delante de ustedes – Yo estaré a su lado caminando de la mano con ustedes. Confíen en Mi y Yo haré mucho más abundantemente de lo que pueden pedir o pensar. ¡Yo tengo algunas sorpresas preparadas para ustedes! Cosas que realmente les van a gustar. Ha sido una temporada que ha tardado en llegar, pero finalmente está aquí – este es el momento de liberar Mi favor y Mis bendiciones que he guardado para ustedes. No miren a la izquierda y no miren a la derecha, mantengan sus ojos en Mi, y Yo a su vez cambiaré lo que era oscuridad en Mi luz admirable. La temporada para la restauración y la cosecha está sobre ustedes – deléitense en Mi presencia y reciban todos los regalos que libremente Yo estoy concediéndoles.
Salmo 67:6 La tierra dará entonces su fruto, y Dios, nuestro Dios, nos bendecirá.
Salmo 65:11 Tú coronas el año con tus bondades, y tus carretas se desbordan de abundancia.
Isaías 43:19 ¡Voy a hacer algo nuevo! Ya está sucediendo, ¿no se dan cuenta Estoy abriendo un camino en el desierto, y ríos en lugares desolados.
Salmo 37:4 Deléitate en el Señor, y él te concederá los deseos de tu corazón.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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