Autor: Magie de Cano

Guía mis pasos conforme a tu palabra, para que no me domine el mal. Salmo 119:133

Para todos aquellos que se sienten como si hubieran sido abandonados u olvidados, Yo les digo honestamente que Yo no los he olvidado. Yo los veo y conozco sus problemas y los dolores de cabeza que han tenido que soportar. No te rindas sin esperanza, dice el Señor. Encuentren un lugar en su vida donde estén en sincronía con el mover de Mi Espíritu, y entonces serán guiados y llevados a hacer todo lo que está en Mi corazón para ustedes. Continuar Leyendo »

Y El respondió: Mi presencia irá contigo, y yo te daré descanso. Exodo 33:14

 Estos son los días de Su presencia, de su visitación. Todos aquellos que saben que estamos viviendo momentos difíciles están desesperados por Su presencia, porque es la única manera de recibir dirección, estrategias, paz y gozo. Esta es una de las más importantes lecciones de Moisés. El había comprobado que sin la presencia de Dios en su vida, era inútil que él intentara cualquier cosa. Continuar Leyendo »

Cuando tú descendiste e hiciste maravillas que nunca imaginamos, los montes temblaron ante ti. Nunca antes hubo oídos que lo oyeran ni ojos que lo vieran, ni nadie supo de un Dios que, como tú, actuara en favor de aquellos que en él confían. Tú has salido al encuentro de los que practican la justicia con alegría, y de los que se acuerdan de ti y siguen tus enseñanzas.. Isaías 64:3-5

Hoy solo quiero animar a muchos de ustedes que han estado soportando situaciones difíciles. Continuar Leyendo »

Así que no temas, porque yo estoy contigo;no te angusties, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra victoriosa. Isaías 41:10

 Algo que no me agrada de viajar en avión, son esos momentos de turbulencia. Sin embargo, lo que me da paz es orar y adorar mientras la atravesamos. Algo similar esta aconteciendo ahora en lo espiritual. Estamos embarcados en un viaje que nos llevará hacia los nuevos comienzos. Continuar Leyendo »

Entonces el Señor me dijo: «El pueblo de Israel es como estos huesos. Andan diciendo: “Nuestros huesos están secos; no tenemos ninguna esperanza, estamos perdidos.” Pues bien, háblales en mi nombre, y diles: “Esto dice el Señor: Pueblo mío, voy a abrir las tumbas de ustedes; voy a sacarlos de ellas y a hacerlos volver a la tierra de Israel. Y cuando yo abra sus tumbas y los saque de ellas, reconocerán ustedes, pueblo mío, que yo soy el Señor. Continuar Leyendo »