En aquel tiempo —declara el Señor— yo seré el Dios de todas las familias de Israel, y ellos serán mi pueblo. Jeremías 31:1

Recientemente, en un sueño, el Señor me llevó a una casa de acumuladores llena de montones y montones de cajas, objetos antiguos y basura apilados en esta casa y llenando la casa hasta el punto en que apenas podía caminar por ella. Luego escuché al Señor hablar, y dijo: «Profetiza a la casa, profetiza a los cuatro rincones de la casa». Continuar Leyendo »

Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos. El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia. Juan 10:9-10

Desperté a las 3:33 a.m., oré, tomé mi teléfono y debía escribir esto. Escuché una suave voz que dijo: «Muy pronto, caminarás a través de las puertas dobles. ¡Habrá sanidad por todos lados!» Continuar Leyendo »

Él enjugará toda lágrima de sus ojos, y ya no habrá muerte, ni habrá más duelo, ni clamor, ni dolor, porque las primeras cosas han pasado. Apocalipsis 21:4

Escuché al Señor decir: «¡No sigas diciendo que eres invisible! ¡No digas que tu voz cae en oídos sordos! Porque Yo he visto tus canciones en el amanecer y tus oraciones en las vigilias de la noche. Solo Yo te he oído profetizar a medianoche cuando todo parece perdido. Continuar Leyendo »

Dios ubica a los solitarios en familias; pone en libertad a los prisioneros y los llena de alegría. Pero a los rebeldes los hace vivir en una tierra abrasada por el sol. Salmos 68:6 NTV

Dios está actuando de manera poderosa en este momento a través del vehículo de la auténtica familia en todo el mundo. Ha habido un profundo clamor y anhelo en los corazones del pueblo de Dios durante mucho tiempo por algo para lo que hemos sido diseñados y que resulta ser el propio modelo y cuna de avivamiento en la tierra. Continuar Leyendo »

Sean fuertes y valientes. No teman ni se asusten ante esas naciones, pues el Señor su Dios siempre los acompañará; nunca los dejará ni los abandonará. Deuteronomio 31:6

Abrazando el poder de la voz y autoridad de Dios

Escucho al Espíritu decir: «Amado, no permitas que el sonido de los tambores de guerra ensordezcan tus oídos al sonido de Mi voz suave y tranquila que habla más alto en esta hora. Inclina tus oídos a la frecuencia del cielo y deja que las vibraciones de Mi gloria y poder vuelvan a sincronizar y revitalizar tu ser más interno, llevándote desde un lugar de miedo y turbulencia a una posición de gran victoria y triunfo sobre tus enemigos…

Escucha!… Continuar Leyendo »