Cristo quiso regalarse a sí mismo una iglesia gloriosa, apartada del mal y perfecta, como un vestido sin una sola arruga ni una sola mancha, ni nada parecido. Efesios 5:27 TLA
Muchas personas en el cuerpo de Cristo en este momento están lidiando con veneno… No es veneno físico, sino veneno del alma. El tipo que se filtra desde viejas heridas, traiciones, decepciones, abuso espiritual y batallas prolongadas. El tipo que no siempre ves, pero lo sientes: en tus relaciones, tu percepción e incluso en tu intimidad con el Señor. Continuar Leyendo »