La tierra que van a ocupar al otro lado del río es una tierra de montes y de valles, que se nutre de la lluvia del cielo; es una tierra que el Señor mismo, tu Dios, cuida: desde que el año comienza, y hasta que termina, los ojos del Señor tu Dios están siempre sobre ella. Deuteronomio 11:11-12

Muchos de Mis hijos están recibiendo órdenes de ponerse en marcha en este momento. Yo los estoy enviando a los campos de nuevas cosechas, nuevas áreas para arar con Mi palabra los corazones endurecidos. Continuar Leyendo »

Esfuércense y cobren ánimo; no teman, ni tengan miedo de ellos, porque contigo marcha el Señor tu Dios, y él no te dejará ni te desamparará. Deuteronomio 31:6

Hay experiencias y situaciones que a veces nos toca vivir y a las cuales muchas veces no les encontramos ni el sentido ni la razón de porque las estamos viviendo. Sin embargo Dios las usa para que veamos su gloria y para llevarnos a un nuevo nivel de fe. Continuar Leyendo »

Jesús le dijo: “¿ Cómo si tú puedes? Todas las cosas son posibles para el que cree. Marcos 7:23

Yo estoy enviándote Mi ayuda. Has estado en el pozo de la desesperación por un largo tiempo, Hay oraciones en el Espíritu que se han ido acumulado. Ellas estaban esperando el momento exacto en el que estuvieras preparado. Hasta ahora aún no estabas listo, pero últimamente la esperanza ha venido de que esto acabará pronto. Pronto podrás moverte con la suficiente fe que te traerá energía para la acción y la acción te llevará a la victoria. Continuar Leyendo »

«Cuando vean el arca del pacto del Señor su Dios, y a los sacerdotes levitas que la llevan, abandonen sus puestos y pónganse en marcha detrás de ella. Así sabrán por dónde ir, pues nunca antes han pasado por ese camino. Josué 3:3-4

Este mes el Señor ha inquietado mi corazón para leer el libro de Josué, realmente he encontrado en el no solo estrategias sino fortaleza. ¡Este es un tiempo de buscar Su presencia para que Su gloria y nuestro destino se revele! Continuar Leyendo »

Ni tampoco se echa vino nuevo en odres viejos, porque el vino nuevo revienta los odres, y entonces el vino se derrama y los odres se echan a perder. Más bien, el vino nuevo debe echarse en odres nuevos. Marcos 2:22

Estamos ante un tiempo de plenitud del Espíritu, sin embargo para contener el vino nuevo de la restauración, necesitamos convertirnos en un ODRE NUEVO. En el proceso de restauración, Dios toma lo que somos y nos trae a un nuevo lugar para poder verter dentro de nosotros lo que El desea entregarnos. Continuar Leyendo »