En medio de todos nuestros problemas, estamos seguros de que Jesucristo, quien nos amó, nos dará la victoria total. Romanos 8:37
Para los que conocemos a Dios, el dolor es un proceso con propósito. Nosotros no atravesamos momentos difíciles, sino que los momentos difíciles nos atraviesan a nosotros para que reflejemos la bella imagen de Cristo Jesús.
El Señor dice:
El camino ha sido escabroso, y las experiencias de tu vida han sido problemáticas y hasta peligrosas. Pero, Yo te he ayudado en cada circunstancia. Tú eres Mío, tú Me perteneces. Pon tu corazón en paz, y permite que Mi paz penetre cada fibra de tu ser, dice el Señor. No temas. Más bien, haz todo lo necesario para limpiar el desastre causado por los problemas que vinieron contra ti, y sé fuerte. Instálate en un lugar de paz a pesar del torbellino que está a tu alrededor. Sobreponte a la urgencia de iniciar una lucha o meterte en la disputa de alguien más porque eso únicamente provocará una situación que tú no deseas enfrentar. Te beneficiarás grandemente siendo un pacificador, y poner tu confianza en Mi para hacer justicia. Levántate y camina en el Espíritu en lugar de tratar de satisfacer tu carne. (Bill y Marsha Burns)
Y el Señor te dice: “¿Acaso no sabes que he escuchado cuando lloras por la noche? Porque hay muchas cosas que te agobian y piensas en las decisiones que tienes que tomar pero las preocupaciones no te dejan pensar ni sentir claramente por lo cual no sabes qué dirección tomar. Pero Yo te digo: Te diré que tienes que hacer exactamente. Tú lo sabrás, será tan claro que no tendrás duda alguna, tú no dirás ¿lo hago o mejor me espero?, porque en ese momento Yo estaré ahí y hablaré por ti” dice el Señor. “Y mi oveja oirá Mi voz y cuando te hable, tú tendrás un espíritu de certeza y dirás, “eso es, es lo que tengo que hacer” y sabrás que es lo que tienes que hacer”. Porque el Señor dice:
Mi voz está en medio de la confusión. Mi voz aleja la depresión. Mi voz, tiene un sonido y una fuerza que llenará tu corazón y sanará aquellos lugares donde no hay paz, en los momentos donde había tristeza habrá vida y sabrás a donde ir”. El Señor te dice: “Haré que tu camino sea seguro. Andarás siempre en luz, y no solo lo haré seguro para ti sino para aquellos que te rodean. Habrán personas a tu alrededor que no tienen idea de que hacer y tú me buscarás a mi no solo para saber que puedes hacer sino para ayudar a los que están en tu diario vivir. El Señor dice,: “Tú sabrás a quién ayudar cuando hayan tomado una mala decisión. Yo estaré ahí contigo, y tendrás mi espíritu en ese momento para saber que decir, dice el Señor. (Cindy Jacobs)
Isaías 30:20-21 Aunque el Señor te dé pan de adversidad y agua de aflicción, tu maestro no se esconderá más; con tus propios ojos lo verás. Ya sea que te desvíes a la derecha o a la izquierda, tus oídos percibirán a tus espaldas una voz que te dirá: «Éste es el camino; síguelo.»
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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