Y bienaventurada la que creyó que tendrá cumplimiento lo que le fue dicho de parte del Señor. Lucas 1:45
Después de doce días enfocadas en orar por nuestro matrimonio puede que aun no podamos ver el panorama completo, han sido días de caminar por fe y no por vista, porque estos cambios suceden gradualmente. Creo que el “de repente” de Dios puede sorprendernos si seguimos aferradas a sus promesas. Nos despertaremos un día y nos daremos cuenta de que todo el tiempo estuvimos moviéndonos hacia delante. Protejamos nuestro corazón contra las mentiras del enemigo. Aunque pareciera que Dios está en silencio, está trabajando en nuestro favor.
Orar por un esposo que no lo merece y seguir caminando por fe en vez de dejarme guiar por mis sentimientos, emociones y lógica humana, muchas veces significa ser malinterpretada. Nuestras acciones pueden parecer absurdas. Pero es tiempo de ir por tu milagro. Siempre he dicho y la Biblia lo respalda, que nunca he visto a una mujer recibir su milagro sentada y con la boca cerrada. Muchas veces le damos muchos “me gusta” a esos posts que nos anuncian que Dios hará un milagro y claro que Dios los hace, pero ¿Y tú qué harás? Si por el contrario ya lo has hecho, y no has visto cambio en tu situación, no te rindas. Cuando venga la tormenta no desistas, has sido llamada para ganar, para ser una conquistadora.
LA MUJER ENCORVADA BUSCO A JESUS: Lucas 13:12 Cuando Jesús la vio, la llamó y le dijo: «Mujer, has quedado libre de tu enfermedad».
ESTER AYUNO Y ORO: Ester 4:16 Ve, reúne a todos los judíos que se encuentran en Susa y ayunad por mí; no comáis ni bebáis por tres días, ni de noche ni de día. También yo y mis doncellas ayunaremos. Y así iré al rey, lo cual no es conforme a la ley; y si perezco, perezco.
RUTH DEJO SU PASADO Y EN MEDIO DE SU LUTO AVANZO A BELEN: Ruth 1:15-16 Entonces Noemí dijo: «Mira, tu cuñada ha regresado a su pueblo y a sus dioses; vuelve tras tu cuñada». Pero Rut le respondió: «No insistas en que te deje o que deje de seguirte; porque adonde tú vayas, yo iré, y donde tú mores, moraré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios mi Dios.
LA SUNAMITA RECLAMO ANTE EL REY SUS POSESIONES PERDIDAS: 2 Reyes 8:5-6 Y mientras él estaba contando al rey cómo había hecho vivir a un muerto, he aquí que la mujer, a cuyo hijo él había hecho vivir, vino para implorar al rey por su casa y por sus tierras. Entonces dijo Giezi: Rey señor mío, esta es la mujer, y este es su hijo, al cual Eliseo hizo vivir. Y preguntando el rey a la mujer, ella se lo contó. Entonces el rey ordenó a un oficial, al cual dijo: Hazle devolver todas las cosas que eran suyas, y todos los frutos de sus tierras desde el día que dejó el país hasta ahora.
LECTURAS PARA HOY – Lee Hebreos Capítulos 11 Y 12 – Hoy pide fe para continuar. Debes creerle a Dios a pesar del aspecto que tengan las cosas. Dios es fiel a Su Palabra y lo que dijo se cumplirá. La batalla que has visto es solo la señal de que algo poderoso se soltara a tu favor. Lucha, persevera, mantente firme. Levántate donde quiera que estés, si has visto lucha y opresión en tu matrimonio no llores, no te dejes herir, no caigas en opresión, Dios te necesita alerta y no anulada. Debes levantarte a orar y declarar que tu casa, tu hogar, tu familia, tus posesiones están bajo la sangre del Cordero. Oremos sometiendo todo espíritu que se ha soltado para golpear a las familias, toda violencia contra las casas, contiendas, pleitos, atmósferas contrarias, palabras de maldición, pérdidas económicas, etc.
OREMOS:
Señor, anhelo Tu salvación, tu restauración y tus milagros. Lo confieso, me ha detenido el miedo a lo que se avecina. No quiero vivir una vida regida llena de temor por las circunstancias que me rodean. No quiero encontrar las respuestas en las personas o lo que el mundo me ofrece. No quiero estar limitada por las voces negativas. No quiero estar satisfecha con placeres superficiales temporales. Y no quiero asfixiarme con la ansiedad por el mañana. Más bien, deseo buscar Tu rostro y conocerte íntimamente. Para escuchar Tu voz y meditar en Tu Palabra. Quiero que en la intimidad me reveles Tus estrategias para mi futuro.
Entonces, Señor, me arrepiento por no reconocer que Tu eres Mi soberano Señor, por mi falta de confianza en ti, por mi falta de fe en que para ti no hay nada imposible y mi incapacidad para creer que deseas restaurar mi matrimonio. Me arrepiento por no rendirme a Ti completamente y rechazo las opiniones de los detractores y los pronósticos sombríos a mi alrededor. Me niego a asociarme con las malas noticias y elijo alinearme con Tus promesas. Descanso en Tu presencia, Mi alma estará tranquila gracias a Tu amor, tu sabiduría y tu poder sobrenatural sobre mi. Cúbreme con tu asombrosa gracia, rodéame con tu favor porque en Ti pongo mi esperanza. Amén.
Con amor y oraciones,
Magie de Cano
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