Están saliendo del patrón de espera

Pues el Padre ama al Hijo y le muestra todo lo que hace. Sí, y aun cosas más grandes que estas le mostrará, que los dejará a ustedes asombrados. Porque así como el Padre resucita a los muertos y les da vida, así también el Hijo da vida a quienes a él le place. Juan 5:20-21

El Señor me habló y dijo: “Dile a Mi pueblo que lo que no pudieron lograr en meses, años e incluso décadas, Yo haré que suceda en un solo día! Su ciclo de fracaso ha llegado a su fin. Ha llegado el tiempo de la aceleración. No me limiten con su pensamiento. Estoy actuando de formas inesperadas, pero verán Mi poder explosivo. La Iglesia está saliendo de un PATRÓN DE ESPERA. El espíritu de retraso ha sido quebrantado. Es tiempo de su llegada”.

Viajando frecuentemente por ministerio, sabía lo que significaba estar en un patrón de espera. Experimentarlo y definirlo, sin embargo, es otra cuestión. Echemos un vistazo a la definición formal: “Un patrón de espera es una maniobra en la cual una aeronave vuela en un patrón con forma de circuito en un área designada. Se utilizan para mantener a una aeronave en un espacio aéreo protegido mientras se retrasa su llegada a un punto posterior a lo largo de su ruta”.

Mi esposa y yo estábamos en un vuelo hacia la ciudad de Nueva York cuando el piloto anunció que había recibido instrucciones de mantenernos en un patrón de espera hasta nuevo aviso. Mientras dábamos vueltas alrededor de la ciudad, pudimos ver varios lugares famosos y comenzamos a tomar fotos emocionados, pero nuestra emoción se desvaneció cuando unos minutos se convirtieron en un largo retraso. Podíamos ver nuestro destino, pero no podíamos llegar allí. Solo seguíamos dando vueltas una y otra vez. Estábamos atrapados en este ciclo repetitivo.

Algunos de ustedes están tan cerca de su promesa. De hecho, incluso pueden verla, pero cada vez que creían que esta sería la vez en que romperían y poseerían lo que Dios ha hablado, fueron retrasados. Comprendan esto, el enemigo ha causado un RETRASO en un intento de frustrar el plan de Dios.

Proverbios 13:12  La esperanza que se demora enferma el corazón, Pero el deseo cumplido es árbol de vida.

Les profetizo a ustedes que la decepción y el retraso están rotos. ¡Esperen un repentino avance positivo en sus circunstancias! ¡Van a llegar al destino de su promesa! Los obstáculos que les han impedido llegar se están despejando. Meditando en esta promesa, abrí mi Biblia y fui al libro de Juan, capítulo 5, y leí la historia del hombre que estuvo enfermo durante 38 años. Esperaba en el Estanque de Betesda con la esperanza de ser el primero en entrar en el agua después de que el ángel la agitara. Año tras año, este hombre intentaba ser el primero y una y otra vez quedaba decepcionado.

Juan 5:6 Cuando Jesús lo vio allí, tirado en el suelo, y se enteró de que ya tenía mucho tiempo de estar así, le preguntó: —¿Quieres quedar sano?

Este hombre estuvo en un patrón de espera durante 38 años. Sufrió repetidas decepciones mientras esperaba desesperadamente que el agua se agitara, esperando en cada ocasión que este fuera “su momento” para ser el primero en entrar y recibir su sanidad. Jesús lo vio y le hizo una pregunta: “¿Quieres ser sano?” El hombre respondió a Jesús con una excusa: “—Señor —respondió—, no tengo a nadie que me meta en el estanque mientras se agita el agua y, cuando trato de hacerlo, otro se mete antes.” (Juan 5:7). Tomen nota, Jesús no le preguntó por qué no había sido sanado. El Señor buscaba llevarlo del pasado hacia su futuro. En esencia, Jesús le estaba preguntando si estaba listo para ser lanzado a un lugar de plenitud. Lamentablemente, algunos están prisioneros de las excusas de por qué se encuentran en esa condición, lo cual les impide recibir lo nuevo que Dios desea hacer. Muchos de ustedes han estado en un patrón de espera durante tanto tiempo que se han fortalecido en un ciclo de derrota. Pero el Señor les está anunciando ahora: “¡ESTE ES SU MOMENTO! No se pierdan lo que estoy haciendo”.

Jesús ignoró por completo las excusas de este hombre y le dio una instrucción profética: “Levántate, toma tu lecho y anda”. Y al instante el hombre quedó sano, tomó su lecho y comenzó a caminar” (Juan 5:8-9). Observen que Jesús le ordenó hacer algo que él no podía hacer. Dios nos está desafiando a hacer lo que nunca hemos hecho. ¡No se pierdan esto! Es crucial que entiendan esto. Lo que este hombre no pudo lograr en 38 años, Dios lo hizo en UN DÍA. Están a punto de presenciar un milagro en un día. El ciclo repetitivo en su vida se rompe hoy. Dios está reviviendo sus esperanzas y sueños. Prepárense para una visión renovada. Cuando el hombre se levantó, comenzó a ver desde una posición diferente. Ya no veía desde una posición de postración. Escucho al Señor decirles: “Prepárense para una vista elevada, claridad en el enfoque y una visión fresca y ampliada”.

La mujer con el flujo de sangre había estado enferma durante 12 largos años cuando su fe demandó la unción, rompiendo el ciclo en su vida. Su fe, acompañada de sus acciones, llevó a la mujer al momento de su milagro. Todo cambió para ella en UN DÍA.

Otro ejemplo bíblico de salir de un patrón de espera es cuando Samaria estaba bajo asedio de los asirios, lo que causó una hambruna. Su economía había caído en picada hasta el punto de que comían estiércol de paloma y cabezas de burro. El avance de su patrón de espera llegó después de que Eliseo profetizara, diciendo: “Oigan la palabra del Señor, que dice así: “Mañana a estas horas, a la entrada de Samaria, podrá comprarse una medida de flor de harina con una sola moneda de plata, y hasta una doble medida de cebada por el mismo precio”. (2 Reyes 7:1). El Señor hizo que el sonido de los ejércitos del cielo fuera escuchado por el ejército asirio, lo que los hizo huir atemorizados. Dejaron atrás todos sus suministros y alimentos. La economía del pueblo de Dios cambió en UN DÍA. No duden de lo que Dios puede hacer en UN DIA. Los cuerpos son sanados, las puertas se abren, las economías pueden cambiar y naciones enteras pueden nacer. ¡Esta es su temporada de UN DIA! ¡Están saliendo de su patrón de espera! (Una palabra profética de Andrew Towe)

Hebreos 10:35-39 Así que no pierdan la confianza, porque esta será grandemente recompensada. Ustedes necesitan perseverar para que, después de haber cumplido la voluntad de Dios, reciban lo que él ha prometido. Pues dentro de muy poco tiempo, «el que ha de venir vendrá, y no tardará. Pero mi justo vivirá por la fe. Y, si se vuelve atrás, no será de mi agrado». Pero nosotros no somos de los que se vuelven atrás y acaban por perderse, sino de los que tienen fe y preservan su vida.

Con amor y oraciones,

Magie de Cano