Y metiendo David su mano en la bolsa, tomó de allí una piedra, y la tiró con la honda, e hirió al filisteo en la frente; y la piedra quedó clavada en la frente, y cayó sobre su rostro en tierra. 1 Samuel 17:49
Hace algún tiempo, el Señor me dijo que hiciera algo sencillo; que mirara lo que tenía en mis manos. En ese momento, mientras miraba mis manos, solo vi vacío. Después de todo, no tenía nada en lo natural. Continuar Leyendo »