Pero me quedaré en Efeso hasta Pentecostés; porque se me ha abierto una puerta grande para el servicio eficaz, y hay muchos adversarios. 1 Corintios 16:8-9
Mientras esperaba al Señor la otra mañana, escuché: “El Señor tu Dios está en medio de ti, como Guerrero Victorioso…” (Sofonías 3:17). Entonces escuché, “QUE SE ABRAN LAS PUERTAS”, repetidamente. Inmediatamente pensé en el Salmo 24: 7-10. Alzad, oh puertas, vuestras cabezas, alzaos vosotras, puertas eternas, para que entre el Rey de la gloria. Continuar Leyendo »