Hija Mía. Sé que estás abrumada en este momento. Sé que te sientes cansada y agotada por las violentas e implacables olas que aplastan el casco de tu barco. Sé cómo te sientes y quiero que sepas que no estás sola. Mira un poco más de cerca a través de la niebla tormentosa, me encontrarás en medio, guiándote a salvo. He preparado un lugar especial para ti, sólo aguanta y mira.
Te estoy guiando a mi “LUGAR SECRETO”, el puerto seguro de la intimidad, sólo el Padre, el Espíritu Santo, tú y Yo. Continuar Leyendo »