AVIVA EL FUEGO
Porque tengo presente la fe sincera que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también. Por lo cual te recuerdo que avives el fuego del don de Dios que hay en ti por la imposición de mis manos. Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. 2 Timoteo 1:5-7
Está en el corazón de Dios y en Su agenda catapultar a miles de niños y jovencitos a la obra del Reino de Dios, que se está expandiendo ahora mismo en la Tierra. Continuar Leyendo »